Afirman Analistas.
Ciudad de México; 24 de Julio.- Más de la mitad de la economía mexicana va a quedar rezagada este año por el menor crecimiento de Estados Unidos, estimaron analistas consultados por EL UNIVERSAL.
La actividad productiva va a mostrar un ritmo más moderado en la segunda mitad de 2022, lo que hará más larga y difícil la recuperación del país en general, de acuerdo con cálculos basados en el reporte de Indicadores Regionales de Actividad Económica 2022 de CitiBanamex.
De las 32 entidades federativas, 21 contribuyen con 73% del Producto Interno Bruto (PIB) nacional, pero su economía no va a lograr superar el nivel que tenía antes de la crisis generada por la pandemia de Covid-19.
El crecimiento de la economía de Estados Unidos está disminuyendo, por lo que la demanda externa en México comienza a perder fuerza de manera notable, mientras que la inflación y las altas tasas de interés pueden limitar el consumo interno, advirtió Guillermina Rodríguez, subdirectora de Estudios Económicos de CitiBanamex.
«Estimamos un crecimiento nacional de 1.5% para este año, menor al necesario para recuperar los niveles de 2019. Esto le va a afectar a entidades federativas que están vinculadas a las exportaciones y a otras ligadas al mercado interno, pero de manera desigual», dijo.
Entre los Estados que van a padecer el mayor rezago se encuentran Quintana Roo y Baja California Sur, cuyas economías son las que más dependen del turismo estadounidense y las cuales se desplomaron más de 20% en 2020.
Desde la perspectiva de Rodríguez, la reactivación de ambos Estados en 2021 y 2022 será insuficiente para recuperar el terreno perdido. Baja California Sur tendrá un rezago de 12.1% y Quintana Roo de 10.4% frente al nivel alcanzado en 2019.
Además del turismo, la construcción será clave en su recuperación y mientras no haya más inversión pública y privada para viviendas, hoteles e infraestructura estará limitado su crecimiento económico, advirtió Rodríguez.
Destacó también a Campeche que, debido a la menor producción de petróleo, donde se estima una nueva contracción económica de 1.7% en 2022, para ubicarse 11.5% por debajo del nivel previo a la crisis sanitaria.
«Campeche ya lleva más de una década con caídas y mientras no se diversifique y siga dependiendo del petróleo, va a seguir teniendo variaciones negativas en su economía», estimó Rodríguez.
Señaló también a las tres economías más grandes del país, Ciudad de México, Nuevo León y Jalisco. La primera ha tenido una recuperación lenta y tendrá un rezago de 7.4% este año.
La capital del país fue de las más afectada en términos de confinamiento, pues a partir de la crisis se cerraron comercios y empresas, lo que restó dinamismo a los servicios, que constituyen 90% de su economía, explicó Rodríguez.
Nuevo León y Jalisco tampoco se recuperarán este año de la pandemia, pero su reactivación ha sido más rápida y no preocupan tanto como la Ciudad de México.
Explicó que Nuevo León tuvo la ventaja de la recuperación económica de Estados Unidos, mientras que Jalisco se ha visto favorecida por el consumo interno de alimentos a pesar de la inflación, ya que hay ciertos bienes que la sociedad tiene la necesidad de seguir consumiendo.
Ante una esperada desaceleración económica en Estados Unidos, las exportaciones mexicanas enfrentan retos, sobre todo las automotrices, por ser el principal socio comercial del país, indicó la organización México ¿cómo vamos?
Destacó el encarecimiento del crédito por las alzas en las tasas de interés para frenar la inflación, lo que impactará negativamente las ventas de autos en la región de Norteamérica.
La investigadora de CitiBanamex alertó que hay Estados que merecen especial atención, donde no se vio tan claro el impacto de la crisis, pero no por enfrentarla de manera más efectiva, sino porque traían rezagos importantes desde antes, como Chiapas, Oaxaca y Guerrero. Estas tres entidades padecen las mayores tasas de pobreza del país, de acuerdo con el Coneval.
Hay otras entidades también con altos niveles de pobreza como Puebla, Tlaxcala y Morelos que mantendrán un rezago superior a 5% este año.
Se requieren inversiones en estas entidades para elevar los niveles de vida de su población, hizo ver Rodríguez.
Apenas la semana pasada, CitiBanamex recortó de 1.8% a 1.2% su previsión de crecimiento del PIB para 2023, por una eventual recesión en Estados Unidos y Europa, así como un escenario complicado por la inflación, tasas de interés y la incertidumbre que prevalece en el conflicto entre Rusia y Ucrania.
«El deterioro de la inversión estadounidense tendría un impacto adicional negativo en las manufacturas en México, especialmente en los sectores con vínculos más estrechos con los socios comerciales en América del Norte», explicaron. Sun
