Por Ernesto L. Quinteros
La Caída de las Oficinas de Regulación Migratoria
Como escenas de una película de ficción fueron las imágenes captadas afuera de las oficinas de regulación migratoria del Instituto Nacional de Migración, al sur de la ciudad de Tapachula, en donde de manera violenta migrantes se enfrentaron con elementos de la Guardia Nacional. Las imágenes ya le dieron la vuelta al mundo.
No es algo nuevo, pero lo sucedido el pasado martes por la tarde, evidenció que la crisis migratoria se ha recrudecido en las últimas semanas.
Los datos que hoy deben de tomar en cuenta las autoridades, es que, entre toda esa población extranjera, hay grupos radicales, que cada día que pasan en esta zona fronteriza, hacen más agresivas sus exigencias, para presionar a las autoridades migratorias y los dejen salir de esta ciudad, obteniendo oficios QR.
Sí, por increíble que parezca, los migrantes quieren obtener por la fuerza la documentación que les permita transitar por territorio mexicano.
Según datos de algunos organismos no gubernamentales, revelan que el 70% de los migrantes que solicitan asilo, visas humanitarias o permisos temporales para transitar por territorio mexicano, no cumplen con los requisitos que marcan las leyes mexicanas.
Las constantes protestas violentes y zafarranchos que protagonizan los migrantes en estas oficinas, lejos de agilizar la atención a los extranjeros, genera más atrasos.
Se Tiene que Aplicar la Ley
Organismos productivos y empresariales de la ciudad de Tapachula aseguran que las autoridades federales deben de aplicar la ley, y sancionar a los migrantes que se enfrentaron violentamente con los cuerpos de seguridad afuera de las oficinas migratorias.
De no hacerlo, se estarían mandando el mensaje equivocado de que en esta zona fronteriza los migrantes pueden hacer prácticamente lo que quieran.
Los grupos de migrantes que promueven la violencia y que constantemente se confrontan con los cuerpos de seguridad, están plenamente identificados, por lo que se les debe de aplicar la ley, y sancionarlos.
Así como urge deportar de manera inmediata a esas personas extranjeras que trastocan la paz social.
Desde la mañana del pasado martes, en las redes sociales, también corrían versiones de denuncias que alertaban a las autoridades, que algunos grupos de extranjeros que viven en diferentes colonias cercanas a las oficinas migratorias, estaban convocando para armarse con palos y piedras e ir a protestar.
Frontera Porosa
Por décadas la frontera sur de México ha permanecido prácticamente desprotegida, ya que se carece prácticamente de todo.
Con la entrada del actual gobierno federal en el 2018, grupos empresariales y productivos de la zona esperaban que esa situación cambiara.
Sobre todo, que se tuviera una mayor inversión en infraestructura fronteriza, que permitiera un mayor control.
Sin embargo, ha sucedido todo lo contrario, las oleadas de extranjeros que siguen llegando a territorio mexicano, han provocado que se incrementen los pasos de extravío en la línea divisoria entre México y Guatemala.
La situación es complicada, y también es más que evidente que se requiere más personal de seguridad para custodiar las Oficinas de Regulación Migratoria, que también ya quedaron pequeñas ante la gran oleada de migrantes que sigue llegando a territorio mexicano.
Son vergonzosas las escenas que se vieron en las pasadas protestas violentas, en donde los migrantes superaron en número a los cuerpos de seguridad y dejaron retenidos en las oficinas migratorias a personal del INM por varias horas.
Pero como siempre, la mejor opinión es la de usted estimado lector.
Por hoy ahí la dejamos, nos leemos mañana. ¡Animooo!
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