* Causa Grave Contaminación al Medio Ambiente.
Tapachula, Chiapas; 05 de enero del 2022.- Este miércoles se cumplieron los primeros 10 días del incendio en el basurero municipal de la localidad y se han consumido miles de toneladas de residuos sólidos, lo que ha expandido la nube tóxica a varios municipios de la región.
Herbert Schroeder Bejarano, director de Protección Civil Municipal, informó en entrevista para EL ORBE que en las acciones para tratar de controlar el siniestro participa la Armada de México, bomberos, varias dependencias de los tres niveles de gobierno, así como tanques cisternas de varios municipios, como Suchiate y Huixtla.
Dijo que todos esos esfuerzos han ido reduciendo de manera paulatina el avance del problema, pero que por debajo de toda esa basura se han formado cavernas que, aunque no se ve, son grandes hogueras que han consumido alrededor de un 40 por ciento de la superficie que ocupan esas instalaciones.
Sin embargo, reconoció que el control del incendio se podría llevar varios días más, ya que están más o menos a un 70 por ciento de lograrlo.
De acuerdo al funcionario, las llamas comenzaron en un área especial en la que se encuentran confinadas las llantas y aún cuando se logró controlar ese sector, rápidamente se propagó al resto del basurero.
Indicó que entre los residuos hay plástico y otros materiales tóxicos y que por ello urge atender la problemática lo más pronto posible.
Indicó que el 30 por ciento que aún falta por controlar, se ha ido hacia abajo y ahora es un incendio subterráneo que es muy difícil de atacar y que por ello han tenido que meter maquinaria pesada de empresas constructoras de la región, que también se han sumado a esas tareas.
Hasta el momento no se conocen con precisión las causas que lo pudieran haber provocado, pero se cree que fue una gran acumulación de gases que se activó con las grandes temperaturas.
Se estima que en las acciones se han aplicado medio millón de litros de agua, que se combinan con los trabajos de la maquinaria, porque el líquido se evapora muy rápido y requiere ser removido constantemente. En los trabajos también se han incorporado empresas distribuidoras de agua en garrafón, quienes han mandado sus pipas.
Las cavernas activas, según su apreciación, son una especie de horno que están a unos tres metros de profundidad y que representan un gran peligro para todos los elementos que están participando en las tareas.
Desde que inició el siniestro, el lunes pasado, se tuvo que resguardar a las familias de pepenadores que habitan en las inmediaciones y también se les impidió el acceso en tanto persiste la misma situación. EL ORBE / JC
