Por Ernesto L. Quinteros
Unos con la Pena y Otros con la Pepena en Medio de la Crisis Migratoria
A nivel nacional, la ciudad de Tapachula se ha posicionado como una de las localidades más caras del país.
Eso se debe que en medio de esta crisis migratoria, con la llegada masiva de familias migrantes de diversas nacionalidades, distintos comercios y prestadores de servicios aprovechan a subir los precios a estas personas.
El tema no es nuevo, a la comunidad migrante que tiene la posibilidad de pagar hospedaje, alimentación y transporte en esta ciudad, se les cobra a precios elevados.
Esa es una de las aristas de este complejo problema migratorio. Y mientras algunos se quejan porque un buen porcentaje de los migrantes viven y hacen sus necesidades fisiológicas en la vía pública, otros están haciendo jugosos negocios con la población extranjera que tiene la posibilidad de pagar su estancia en esta localidad.
Ante este escenario es importante que la federación de una “atención especial a Tapachula”. No solo con acciones a través de las diferentes secretarías y dependencias, como INM, Profeco, COMAR, Secretaría de Economía, etcétera.
Porque si hay algo de lo que nos hemos quejado los tapachultecos, es la falta de atención institucional, pero sobre en términos de “un mejor presupuesto” por parte de la federación.
Por eso urge, que a esta ciudad se le destine mayores recursos presupuestales, para que, desde las autoridades locales, también se pueda atender una gran diversidad de problemas que se tienen en medio de esta crisis migratoria.
El pasado miércoles, la población miró con muy buenos ojos el operativo de seguridad instruido por la presidenta de México Claudia Sheinbaum para Tapachula, ya que gracias a ello se desplegó un número importante de elementos de la Guardia Nacional.
Según se sabe, esto es parte de la nueva estrategia nacional de seguridad, y vendrán otras acciones más.
Y hacemos referencia a este tema, porque, así como en seguridad también en otros ámbitos se requiere el apoyo de la federación.
Como ya lo hemos comentado en repetidas ocasiones, Tapachula, en esta región de la frontera sur se ha convertido en el epicentro de la crisis migratoria.
Por eso insistimos, requiere de un mayor presupuesto, para generar una mejor infraestructura, con más y mejores servicios públicos, etcétera. Porque con los mismos recursos de siempre, no se logrará mucho.
Es algo que ya deberían ir analizando nuestros diputados locales y federales, porque el tiempo apremia.
Y mientras unos andan con la pena, porque les afecta el ingreso masivo de migrantes. Otros andan en la pepena, dando servicios caros al poco porcentaje de migrantes que puede pagar hospedaje, alimentación, transporte, etcétera.
Todo esto sucede en plena recta final del 2024, estamos a ocho semanas de que concluya el presente año, y el intenso flujo migratorio parece no tener fin en esta zona fronteriza.
Mientras tanto, en otro frente, organismos defensores de los derechos humanos, ya están anunciando que para el próximo 5 de Noviembre saldrá de Tapachula una nueva caravana de migrantes de diversas nacionalidades.
En donde, por cierto, de manera simultánea saldrá otro contingente de la capital del estado Tuxtla Gutiérrez. Ambas caravanas tienen planeado unirse en el municipio de Arriaga en la costa de Chiapas.
Esto habla de lo complicado que se ha puesto el ingreso masivo de migrantes a esta zona fronteriza, en donde según datos extraoficiales, diario cruzan por las balsas del río Suchiate un promedio de 800 a mil 200 migrantes. En fin.
Por hoy ahí la dejamos, nos leemos mañana. ¡Animooo!
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