Por Ernesto L. Quinteros
¿Hay Crisis Migratoria?
La inconformidad de miles de migrantes que se encuentran varados en esta región de la Frontera Sur de México, principalmente en la ciudad de Tapachula, sigue creciendo y se puede salir de control.
Este miércoles continuaron las protestas de los extranjeros, principalmente de Haití, quienes aseguran que el gobierno mexicano a través del Instituto Nacional de Migración los tiene retenidos en esta región y no los quieren dejar seguir su viaje a la frontera entre México y Estados Unidos.
Además de que se quejan de presuntos actos de corrupción y robo de parte de supuestos elementos del Instituto Nacional de Migración, que parece que son los únicos que están ganando a manos llenas en medio de esta crisis humanitaria.
Son miles de familias migrantes. Mujeres, niños, jóvenes y adultos que siguen llegando de manera constante a esta zona.
Y lo peor del caso es que ya ni la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR), que en teoría es el órgano desconcentrado de la Secretaría de Gobernación de México para atender a los migrantes que buscan afanosamente refugio en nuestro país, quiere ya atender a estas familias.
Según datos dados a conocer por migrantes haitianos, en las oficinas de dicho organismo les están dando cita para enero o febrero del próximo año para que los extranjeros puedan lograr su estatus de refugiados en nuestro país.
En pocas palabras les están dando largas para retenerlos, cuando ya muchos llevan aquí un año.
Es decir, la COMAR, al igual que el INM, ya fueron rebasados por el intenso flujo migratorio en esta región.
Lo irónico de esta situación, es que mientras a nivel nacional se da a conocer en medios de comunicación nacionales que el gobierno de México está dando refugio a ciudadanos de Afganistán, que recientemente llegaron a nuestro país en vuelos oficiales, apapachados con todos sus derechos humanos y recibiendo la ayuda necesaria. En esta zona fronteriza, se vive una crisis migratoria, a la que no se le ha dado la atención necesaria.
La situación es preocupante, al grado que también la agencia de la ONU, conocida como ACNUR en nuestro país, y que se encarga de proteger a los refugiados y desplazados por persecuciones o conflictos, y promueve soluciones, mediante el reasentamiento voluntario en su país de origen o en el de acogida. También ha sido rebasada en su capacidad de atención.
Y entonces, si lo que estamos viviendo en esta frontera sur no es una crisis migratoria y humanitaria, que nos expliquen ¿Qué es?
Porque esta situación se agudiza, ya que, debido a la nula vigilancia en esta región fronteriza entre México y Guatemala, es aprovechada todos los días y a toda hora por cientos de migrantes que cruzan sin ningún problema a territorio nacional.
Y como ya lo hemos comentado en otras ocasiones, mientras los gobiernos de los países involucrados en el tema migratorio no se pongan a trabajar en resolver las causas que están generando el éxodo y el desplazamiento de miles de familias de diversas partes del mundo, la problemática va a continuar.
Según especialistas en el tema, se pronostica para próximas fechas el arribo de más migrantes a México por esta zona fronteriza. ¿Y entonces? ¿Qué va a pasar?
La mejor opinión es la de usted estimado lector.
De mi WhastApp: Vecinos de las oficinas de ACNUR en Tapachula, están molestos, debido a que funcionarios de dicho organismo internacional siempre obstruyen banquetas y vialidades, así como espacios de estacionamiento particulares.
“Si dicen que no es cierto, vamos a mandar los videos”.
Por hoy ahí la dejamos, nos leemos mañana. ¡Animooo!
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