Inder Bugarin
Al menos mil 48 mexicanos murieron intentando cruzar la frontera con Estados Unidos durante la última década, revela el Proyecto de Migrantes Desaparecidos (MMP) de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
La cifra coloca a México con el mayor número de personas migrantes muertas cuyo origen fue identificado por el organismo desde 2014, después de Afganistán, Myanmar, Etiopía y Siria.
Entre 2014 y 2023 el proyecto con sede en Berlín contabilizó 63 mil 285 mil migrantes muertos o desaparecidos a nivel planetario. Del total, fue posible identificar el país de origen de 22 mil personas. El bloque más numeroso fue de afganos, 3 mil 471; seguido por birmanos, con 2 mil 202; etíopes, con mil 565; sirios, con mil 270, y mexicanos.
Casi 60% de las muertes documentadas durante la migración están vinculadas a ahogamiento y sólo de 40% fue posible obtener información sobre su sexo.
De las 25 mil 925 víctimas que se tiene información demográfica, 17 mil 165 corresponden a hombres, 5 mil 476 a mujeres y 3 mil 487 a niños. «A pesar de los compromisos políticos y la atención periodística, las muertes de migrantes siguen aumentando, siendo 2023 el año que marca el saldo anual de muertes más elevado de los registrados, cuando más de 8 mil 500 decesos se registraron», informa el organismo. En lo que va del presente año, la tendencia es igualmente alarmante, particularmente en el Mediterráneo, en donde las llegadas han sido más bajas que en el mismo periodo del año pasado, pero la cifra de muertes se mantiene tan alta como el año pasado.
Los expertos afirman que los datos deben tomarse con cautela, debido a que son probablemente sólo una fracción de la cifra real de vidas perdidas en todo el mundo.
Por lo menos mil 275 migrantes camino a su destino perdieron la vida en todos los países de América durante 2023, la mitad de los casos tuvo lugar en la frontera entre México y Estados Unidos: 636 fallecimientos.
La cifra es menor a la registrada el año anterior; en el caso concreto de la frontera sur de México se contabilizaron 686 muertes.
El organismo asocia la disminución a una cuestión de falta de acceso a información de las autoridades competentes y no a la reducción de los incidentes letales.
Los datos confirman una tendencia preocupante: más de 600 muertes anuales desde 2021 y el aumento de los intentos por cruzar esa frontera.
Zoe Sigman, analista de datos del proyecto Migrantes Desaparecidos, explica a EL UNIVERSAL que a diferencia de otras rutas o cruces, las muertes en la frontera norte mexicana suelen estar bien documentadas dada la disponibilidad de datos oficiales y la cobertura de los medios informativos locales.
«Aunque dados los diversos desafíos en la recopilación de los datos, como resultado de la inmensidad del desierto, los cuerpos que nunca se recuperan del desierto o el río Bravo, y la inaccesibilidad de algunos datos oficiales, las cifras siguen siendo un recuento insuficiente del número real de vidas perdidas.
«Todos los que mueren dejan atrás a sus familiares y seres queridos, muchos de los cuales experimentan una pérdida ambigua y continua, porque los restos de la persona que emigró nunca son identificados».
La mayoría de las víctimas en la frontera entre México y Estados Unidos provienen de Centroamérica, 306, seguido por los sudamericanos, 54; seis personas fueron africanas. Por país, 146 fueron mexicanos, 86 guatemaltecos, 57 hondureños, 23 venezolanos y 13 colombianos y salvadoreños, respectivamente. En 252 casos no se sabe su país de origen.
Al menos 382 víctimas fueron identificadas como hombres; 94 como mujeres y 34 niños. Sigman informa que 159 personas murieron por ahogamiento y 154 por condiciones ambientales y falta de alimentos, agua y alojamiento apropiado.
La investigadora dice no estar en condiciones de anticipar la tendencia prevista para este año, lo que se sabe al 18 de marzo es que en esa parte del mundo han muerto 76 personas en 2024.
Dato
1,275 indocumentados camino a su destino perdieron la vida en todos los países de América en 2023. Sun
