* Por eso Bukele Quiere Reelegirse.
Tapachula, Chiapas; 16 de septiembre del 2022.- El presidente de la República de El Salvador, Nayib Bukele, anunció éste fin de semana que participará en el proceso electoral a celebrarse en ese país en el 2024, para ir por una reelección en el cargo, ante las modificaciones a las leyes de esa nación por parte de la Suprema Corte, que a partir de ahora lo permite.
Justo cuando encabezaba la celebración del Día de la Independencia de El Salvador, que coincide con la de México y de otros países, dio a conocer a los medios de comunicación que, al concluir su mandato, se presentará como candidato en la nueva contienda, que de ganar, prolongaría su mandato por cinco años más.
Antes de esa reforma, las leyes establecían que un mandatario nacional podría participar de nuevo, siempre y cuando tuviera que esperar un periodo de 10 años después de concluido su periodo, pasa poder hacerlo.
El anunció ha causado sentimientos encontrados, porque por un lado varias naciones y gran parte de la población reconoce los esfuerzos históricos para combatir a las bandas delictivas, como los Mara Salvatrucha y los Barrios 18, hay otros que temen que se trata de la pérdida de la democracia y el retorno al autoritarismo, como ya está pasando con otras naciones de la región y sus gobierno que se han convertido en dictaduras.
De acuerdo a su versión, la decisión de contender por la Presidencia dentro de menos de dos años, la tomó luego de hablar sobre ese tema con su esposa y con su familia
Bukele, quien asumió la Presidencia en junio del 2019, saltó a la mirada internacional y a la aceptación popular luego de declararle – en marzo de este año- la guerra a las bandas delictivas que mantuvieron asolado por décadas a ese país, por delitos como extorsión, homicidios, asalto, robos, terrorismo, lesiones, narcotráfico, lavado de dinero, violaciones sexuales, entre otros.
Ante ese panorama, organizaciones civiles y de Derechos Humanos han salido en defensa de los detenidos, lo que ha causado también la crítica de la población, porque se teme que pudieran haber intereses de por medio.
El último balance de los logros hasta la fecha, señala que esa medida ha permitido la detención de alrededor de 52 ml 500 personas, supuestamente por estar vinculadas o ser miembros de esas pandillas.
La guerra antimara allá, ha provocado una desbandada de esos grupos delictivos hacia otras naciones vecinas, como Nicaragua, Honduras, Guatemala y México, en donde ya las están tomando como nuevos centros de operación.
De concretarse las aspiraciones de Nayib, se teme que la migración de esas bandas, sería de manera definitiva y buscarían espacios en zonas con mejores condiciones económicas, como el caso de México.
Ellos han logrado infiltrarse entre las caravanas de migrantes para poder cruzar las fronteras y avanzar hacia las ciudades y regiones a las que les han echado el ojo, como el Soconusco y en especial Tapachula, en Chiapas.
Su presencia, se teme, pudiera ser el reflejo del aumento en diversos delitos graves en lo que va del año y que aún siguen impunes, como las extorsiones, llamadas popularmente también como «cobro de piso» o «impuesto de guerra», homicidios, asaltos y robos. EL ORBE / Ildefonso Ochoa Argüello
