* Migrantes, los Principales Desestabilizadores.
Tapachula, Chiapas; 26 de julio del 2022.- «No podemos permitir que el tema de la inseguridad en la localidad siga creciendo, por lo que debe de haber la suma de esfuerzos de las tres instancias de gobierno para poner en marcha las estrategias que sean necesarias y frenar la invasión de los migrantes que solo han venido a desestabilizar y crear intranquilidad entre la población».
Así lo dijo en entrevista para el rotativo EL ORBE, María Eugenia Moreno Mendoza, tesorera de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), en México, quien agregó que ciertamente no se puede generalizar que todos los migrantes sean malos, pero se sabe que al interior de esos grupos se han infiltrado verdaderos delincuentes, que son los que han puesto en jaque a la población.
Según su punto de vista, los cuerpos policíacos deberían realizar operativos de seguridad y redadas permanentes en las colonias y en el centro de la ciudad, para identificar a los delincuentes entre los migrantes.
Respecto a su posición como cámara, dijo que los integrantes de Canacintra ya se reunieron con el nuevo titular de la Fiscalía de Distrito Fronterizo Costa, y que la idea es sumarse al trabajo y proyectos que viene desarrollando, con el propósito de bajar los índices de inseguridad.
Entre las acciones contempladas a realizar, comentó que se buscará que, en la comisión de delitos, insistir en la población que es necesario presentar las denuncias correspondientes, para que las autoridades puedan actuar de inmediato y así darle seguimiento.
Insistió que el tema de la inseguridad preocupa a todos, incluyendo a las cámaras, por lo que consideró que es prioritaria su atención, ya que hay mucho temor entre los empresarios y en todos los sectores por la forma en que ha ido creciendo. La idea común es que se erradique hasta donde se pueda este problema.
Puntualizó que la problemática se agudizó, porque los delincuentes no solo amenazan a sus víctimas, sino también tienen datos, fotos y direcciones de las familias afectadas, a las que amenazan con extorsionarlos con el llamado «cobro de piso». EL ORBE / Nelson Bautista
