Tapachula Convertida en Sodoma y Gomorra
Ernesto L. Quinteros
Definitivamente muchas de las decisiones de Gobierno Federal se toman desde un escritorio, no se analizan y se estudian de manera previa antes de aplicarlas.
Desde hace unas semanas trascendió que se reubicarían las oficinas de la Comisión Mexicana para Ayuda a Refugiados (COMAR) y la oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), en las antiguas instalaciones de PEMEX, al sur de la ciudad de Tapachula, en donde también hay universidades y comercios.
Curiosamente, en esa zona, con la complacencia de las autoridades del Ayuntamiento de Tapachula, también han proliferado los antros de vicio.
Ya se imaginará usted, estimado lector, el relajito que se va armar, si se llegan a reubicar a esas dos dependencias que a diario atienden a cientos de migrantes.
Si ya de por sí Tapachula se ha convertido en la Sodoma y Gomorra de la región Costa de Chiapas, con tanto antro y prostíbulo que a diario abren disfrazado de botanero.
Las autoridades deben de analizar bien a dónde van a reubicar las oficinas en mención, pues estamos ante un escenario inédito, con el fenómeno migratorio, pues en esta región existe miles de personas extranjeras de diferentes partes del mundo.
La combinación “antros y migrantes” no le viene bien a este sector de la ciudad, y el resultado seguramente lo pagarán comerciantes, estudiantes y vecinos.
No se trata de estigmatizar y discriminar a los migrantes. Se trata de que las autoridades federales en México hagan las cosas bien, que analicen las zonas a donde deben de atender a esta población que a diario sigue llegando a territorio nacional.
Es cierto que las caravanas de migrantes ya disminuyeron, pero de que aún siguen llegando familias a esta región fronteriza, siguen llegando, y eso no lo podemos ocultar.
Es por ello que las autoridades deben estar a las alturas de las circunstancias, y no tomar decisiones a la ligera.
Servicio de Limpia Privatizado.
La promesa del aún presidente municipal de Tapachula, Oscar Gurría Penagos, de mejorar el sistema de la recolección de la basura en la ciudad, solo quedará en promesa, ya que los empleados municipales han sido denunciados por pedir cuotas económicas a la población.
Sí, los camiones que rentaron sin los procesos de transparencia, sin licitación y a precios exorbitantes, y que ahora cubren diferentes rutas de la geografía local, le están saliendo demasiado caros a la población.
En diferentes colonias de la ciudad, vienen denunciando que los empleados municipales que van tripulando dichos automotores, ya piden cuotas económicas.
En un inicio, empezaron con el tradicional “…si gusta coopere para el refresco o para el pollo”.
Sin embargo, ahora ya le subieron de tono y de la solicitud de una dádiva, ya pasaron a la exigencia de cuotas económicas, lo cual a todas luces es un abuso.
En primera porque son empleados del municipio y se supone que reciben un sueldo, y en segunda, porque los dichosos camiones son rentados con dinero del pueblo.
Por el momento el contrato millonario de estos camiones de basura sigue siendo todo un misterio, pues no se sabe qué empresa es la que está rentando los camiones, tampoco se sabe bajo qué condiciones y cuáles son las cláusulas del contrato.
Seguramente no tardarán en salir ante la quemante luz pública dichos documentos, pues al parecer, en el Gobierno Municipal morenista ya andan del chongo.
La lucha intestina en la caja de cristal se comenta, es debido a que ya hay quienes suspiran y anhelan ser los sucesores de Gurría.
Sí estimado lector, yo también pienso lo mismo que usted, los funcionarios locales apenas llevan diez meses cumplidos en el cargo y ya empezaron a pelearse.
Eso demuestra que el todavía Edil no tiene el control ni de su equipo de trabajo, y tampoco cuenta con gente de confianza, pues ya empezaron las traiciones y las patadas bajo la mesa.
Este jueves corrieron diversas versiones en las redes sociales de supuestos cambios de titulares de Área en el Gobierno local.
Así que de nada sirvieron los miles de votos que el pueblo les brindó el pasado 1º de Julio del 2018.
La mal llamada Cuarta Transformación está saliendo un verdadero fracaso y tiene decepcionada a la población tapachulteca.
Hoy, nuestra gente tiene más dudas que respuestas, porque debido a la mala administración municipal se ha generado que los problemas crezcan en esta localidad.
Por ejemplo, la inseguridad sigue igual o peor, los servicios municipales como la recolección de la basura, están resultando todo un fraude, la atención ciudadana en Palacio Municipal es pésima, obras sociales importantes de parte del Ayuntamiento no hay, el ambulantaje sigue creciendo, las cantinas y la prostitución sigue proliferando, y así le podríamos seguir mencionando la gran diversidad de problemas que existen en las diferentes colonias y comunidades de esta ciudad.
Y por si esto fuera poco, Gurría sigue escondiendo celosamente la información del proceso de entrega-recepción con la administración priista pasada. Entonces nos preguntamos, ¿y la transparencia?, ¿y la rendición de cuentas gubernamental?
Colonos Vigilantes.
Debido al nulo servicio de seguridad que se supone debería de prestar la Secretaría de Seguridad Pública Municipal de Tapachula, habitantes de diferentes colonias de la ciudad se vienen organizando para realizar recorridos de vigilancia.
La medida sin duda es buena y ha dado buenos resultados, sin embargo, también es peligroso que el pueblo haga justicia con mano propia.
En repetidas ocasiones lo hemos comentado, pues la medida de que la misma gente haga labores de policía, y no solo detenga, sino linche y torture, también puede generar más violencia, e incluso, pueden pagar justos por pecadores, como ha sucedido ya en otras partes de nuestro país.
Así que “aguas”, porque el hartazgo ciudadano se puede convertir en ingobernabilidad.
Por hoy ahí la dejamos, nos leemos mañana. ¡Ánimo!
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