Segunda Ola Mortal
Oscar D. Ballinas Lezama
La pandemia del Coronavirus es una realidad amarga para la humanidad, el letal virus tiene a todo el mundo contra la pared y se ha llevado más de un millón de vidas, además de aumentar más la pobreza en los países del tercer mundo, entre los que destaca México que se ubica en el cuarto lugar por el número de muertos a causa de esta peste del siglo XXII.
La urbe de hierro y el Estado de México se han convertido en el epicentro de esta calamidad; la mayoría de las personas han decidido enfrentarla, argumentando la mayoría de los kamikazes aztecas que no quieren morirse de hambre encerrados en sus casas y por ello, salen a las calles en busca del pan de cada día para sus familias.
Sin embargo, no toda la gente lo hace por necesidad de sobrevivencia, una gran mayoría se arriesga a infectarse del Covid cuando deja el confinamiento de sus hogares para divertirse en fiestas, discotecas, cantinas, las playas y otros lugares con actividades no esenciales.
Para nadie es secreto que las fiestas navideñas fueron caldo de cultivo de contagiados de Covid, provocando que la mayoría de los hospitales del centro y norte del país estén saturados de la enorme cantidad de enfermos, al grado que muchos de los rechazados de las instituciones de salud que están hasta el tope, si tienen los medios económicos buscan sanatorios privados; los pobres se quedan en sus casas a esperar un milagro, acudiendo a los medicamentos caseros como su única esperanza de sobrevivencia.
En Chiapas los hospitales del IMSS empiezan a recibir los enfermos de Covid, sin embargo, aún tienen suficientes camas, ventiladores mecánicos y demás infraestructura para soportar el embate de la segunda ola de Coronavirus.
Recientemente, el director del IMSS, Zoé Robledo, gestionó la adquisición de ambulancias equipadas para incorporarlas en esta batalla contra el enemigo invisible del Covid-19; varios de estos vehículos fueron entregados en la Unidad de Medicina de Atención Ambulatoria en Tuxtla Gutiérrez.
Funcionarios del Seguro Social en Chiapas, reconocieron el esfuerzo y la gestión del director general, Robledo Aburto, para obtener las ambulancias que en estos tiempos de pandemia les han venido como ‘anillo al dedo’, ya que, con ello se busca fortalecer la atención que otorgan dos de las unidades médicas más grandes y con mayor carga poblacional de esta entidad chiapaneca.
Mientras tanto, la Secretaría de Salud en el Estado informó que Chiapas registró 14 nuevos casos de contagiados por Coronavirus y dos fallecimientos por la misma causa, lo que ha originado hasta la fecha 7 mil 535 contagios y 592 defunciones, según el saldo oficial.
De estos nuevos casos que deben poner en alerta a todos los chiapanecos, cinco infectados fueron detectados en Tuxtla Gutiérrez; tres en San Cristóbal de Las Casas, tres más en Chilón, Comitán, Las Rosas, Palenque, Tuxtla Chico y Yajalón, con un enfermo cada uno.
Entre los muertos en las últimas 24 horas, se informó que uno de ellos se detectó en Tapachula, mientras que la segunda occisa fue encontrada en la capital chiapaneca, en donde por cierto, la ola del Coronavirus cada vez es más fuerte; sucediendo algo similar en Tapachula, donde infinidad de asintomáticos acuden al IMSS para saber si están contagiados, reciben las indicaciones y advertencias médicas y regresan a sus casas, bajo reserva de apegarse a un control sanitario continuo, así como a recluirse para no propagar e virus.
De ahí la insistencia del gobernador Rutilio Escandón Cadenas, para que los jóvenes dejen de estarle ‘jalando la cola al diablo’ cuando salen a fiestas, discotecas o los antros en donde se contagian y luego infectan a sus padres o abuelos, quienes por su edad tienen menos defensas contra el virus y muchos han perdido la vida, consecuencia de la irresponsabilidad de los muchachos.
El contenido de esta columna es responsabilidad exclusiva de SU AUTOR y no del periódico que la publica.
