En su Apogeo los “Polleros”.
Tapachula, Chiapas; 25 de enero del 2022.- El gobierno federal cambió repentinamente su postura migratoria de puertas abiertas para conceder por miles las visas humanitarias, empleo, programas sociales, servicios médicos, educación, alimentación, apoyos económicos y otros a los indocumentados, y ahora ha iniciado una persecución en contra de ellos, hasta en el interior de los hoteles.
Al mando de la delegada en Chiapas del Instituto Nacional de Migración (INM), Paola López Rodas, los agentes han realizado operativos en busca de migrantes, como las acciones emprendidas este martes en el centro de Tapachula, en las que participaron también efectivos de la Guardia Nacional (GN).
Los uniformados, que se desplazaban en varias unidades oficiales, fueron desplegados en la 2a avenida norte, entre la central y la 1a poniente, en donde entraron a un hotel ubicado en ese punto del centro de la localidad.
Sin presentar alguna orden de cateo, dijeron que una «denuncia anónima» había señalado que en ese lugar habían indocumentados escondidos y hasta muy probablemente traficantes d seres humanos, y que por ello habían llegado a «rescatarlos».
Lo cierto es que los agentes entraron a las instalaciones y sacaron a varios extranjeros, los subieron a las camionetas y se los llevaron con rumbo desconocido, aunque se cree que fue hacia la Estación Migratoria Siglo XXI, al norte de la ciudad.
Sin embargo, algunos defensores de los derechos humanos precisaron que no hay deportaciones por lo pronto debido a que países centroamericanos cerraron sus fronteras por el alto número de contagios de Covid-19 y que, por lo mismo, se desconoce a dónde están llevando a los detenidos y qué están haciendo con ellos.
Por otro lado, hay hoteles, pensiones, casas de huéspedes y cuarterías que se han prestado para permitir que indocumentados les renten habitaciones de manera temporal, en tanto logran hacer «acuerdos que les permitan seguir su camino hacia los Estados Unidos.
Sobra decir que el turismo ha salido despavorida de la frontera sur de Chiapas, por la presencia de miles de indocumentados que convierten a Tapachula en una ciudad propensa a la inseguridad y la violencia, y el INM no cuida la franja limítrofe con Guatemala, que sigue estando abierta de par en par. EL ORBE / Ildefonso Ochoa Argüello
