Ante Violencia en Sinaloa, Negocios Piden Reestructurar Créditos

La economía de Sinaloa empieza a pagar la factura de la violencia que lleva semanas azotando a varios de sus municipios, cuyos comercios piden a los bancos alternativas para reestructurar sus créditos con el fin de seguir operando.
El Producto Interno Bruto (PIB) del estado que gobierna Rubén Rocha Moya ocupa la posición 17 por tamaño en el ranking nacional, pero la cartera vencida de la banca privada entre abril y junio fue de mil 401 millones de Pesos y se encuentra entre los 10 saldos más altos del país, de acuerdo con datos del Banco de México (Banxico).
«Venimos de un julio y agosto muy malos. Nuestro septiembre apenas iba a empezar. Necesitamos reestructurar nuestros créditos, nuestras tarjetas para seguir avanzando. El impago no es la solución. Queremos apoyarnos y tener un tiempo de gracia para volver a tener el flujo», dijo la presidenta de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condensados (Canirac) delegación Culiacán, Laura Guzmán.
El clima de inseguridad trae consigo horarios restringidos y pocas ventas, lo que impedirá a los pequeños establecimientos mantenerse al día con sus compromisos financieros.
El especialista en finanzas y docente de la Escuela Bancaria y Comercial (EBC), Carlos Aréchiga Ramírez, opinó, que, aunque no es una situación contemplada en los contratos bancarios, se trata de una situación de fuerza mayor, ya que, al no estar la economía en normalidad, los negocios se ven obligados a renegociar las condiciones de los préstamos en caso de no poder pagarlos.
Compañías modifican operación.
Grupo Coppel, originario de Sinaloa, mantiene la operación en la entidad bajo las limitaciones que permite la situación, fortaleciendo las medidas de seguridad para colaboradores y clientes, siempre en comunicación estrecha con las autoridades.
«Hemos tomado medidas como facilitar transporte a nuestro equipo para trasladarse a sus centros de trabajo, y hemos limitado aperturas de tiendas, horarios (para que los traslados sean con luz de día) y rutas de distribución de mercancía en zonas donde las autoridades han compartido recomendaciones puntuales. Estamos atentos a las medidas de seguridad que las autoridades implementen y actualizamos el estatus de nuestras operaciones según sea el caso», expuso Coppel a EL UNIVERSAL.
El director general de Compartamos Banco, Enrique Majós, dijo que, dado lo observado, la mayor afectación se está teniendo en la actividad económica de Sinaloa, sin que se haya registrado un tema de amenaza de la seguridad física de clientes y colaboradores, pero el entorno obliga a los negocios a reducir sus horarios, lo que disminuye los ingresos.
Seguros adaptan negocio.
La Asociación Mexicana de Agentes de Seguros y Fianzas (Amasfac) dio a conocer la situación de Sinaloa, donde los grupos en enfrentamiento se roban autos para efectuar hechos de violencia tendrá un impacto sobre el precio de los seguros. Mientras tanto, informó que se toman medidas para disminuir el riesgo de la operación en el estado.
«Los incrementos en primas no son inmediatos; sin embargo, esta situación ya lleva tiempo suficiente para que algunas aseguradoras hagan ajustes en sus precios, pero considero que la mayoría ha sido conservadora en los ajustes, apostando a una pronta recuperación de la seguridad en la zona afectada», dijo el presidente del Comité de Automóviles de la Amasfac, Alejandro Sobera.
Sin que de momento haya cifras oficiales sobre el impacto para el sector asegurador, el especialista explicó que las camionetas grandes suelen ser las más útiles para quienes se ven envueltos en estas situaciones de riesgo en Sinaloa, pero al final todos los asegurados corren riesgos directos o indirectos, ya sea de robo o vandalismo.
«Los asegurados están recibiendo todo el apoyo de las aseguradoras tanto en sus reclamaciones como en renovaciones e incluso contrataciones nuevas, los que pueden batallar más serán los clientes nuevos de los que la aseguradora no tiene un historial y será más cautelosa para aceptar un riesgo nuevo», dijo el representante de la Amasfac.
Cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública señalan que en septiembre se robaron 400 autos en Sinaloa.
A partir de 2021, la economía sinaloense marcha más despacio que la media nacional y continuará así, por lo menos, hasta el próximo año, según las previsiones incluidas en el reporte anual de Indicadores Regionales de Actividad Económica 2024 de CitiBanamex. Sun