* Pero Biden ya Tiene dos Estrategias Para Frenarlos.
Tapachula, Chiapas; 29 de Abril del 2023.- Estados Unidos contempla que a partir del jueves 11 de mayo se cancelen las restricciones migratorias que había implementado con la justificación de evitar los contagios masivos del virus del Covid-19, y con ello se podía deportar de inmediato a migrantes sin documentos que arriben a ese país.
Por ello, organizaciones sociales y de derechos humanos advirtieron éste sábado que, de ser así, habría alrededor de un millón de extranjeros listos para emprender el viaje a Norteamérica desde varias regiones del mundo, sobre todo de Centro y Sudamérica, lo que se transformaría en el éxodo voluntario más grande en la historia, realizado en un mismo año.
Sin embargo, ya habría una estrategia para tratar de frenar ese gigantesco movimiento con dos estrategias. La primera que tiene que ver con endurecer las medidas migratorias en México, con la reestructuración total del Instituto Nacional de Migración (INM), que no ha podido superar los yerros en los que ha caído en los últimos cuatro años.
La otra, con una visión mucho más amplia, el gobierno de Joe Biden contempla abrir lo más pronto posible los dos primeros «Centros Regionales de Procesamiento», en donde se recibirían las solicitudes de asilo de los migrantes, sin necesidad de llegar a México y por ende tampoco a los límites con esa nación de las barras y las estrellas.
Uno de esas oficinas estaría instalada en Guatemala, para atender a oriundos de los países centroamericanos, y una más en Colombia, con lo mismos fines pero para otras naciones más lejanas, aunque la idea es poner en marcha varias más, para convertirse en el «muro invisible». El extranjero de ese tipo que avance sin pasar esas barreras, lo hará de manera ilegal.
Genaro Zaquín Siu, de la organización defensora de los derechos «Vamos Juntos», de Guatemala, dijo en entrevista que esa situación ha encendido los focos rojos, porque no hay la capacidad en infraestructura, ni en temas de educación, salud, alimentación, seguridad y servicios, para la cantidad de gente que pudiera llegar y esperar hasta que les resuelvan sus status.
Apuntó que valdría la pena, si es que se pone en marcha esa estrategia, que el Gobierno de Estados Unidos explique a detalle los tiempos que requerirá para dictaminar las resoluciones, porque de lo contrario Guatemala y Colombia serían «cuellos de botella» y la inseguridad aumentaría.
Asimismo, se deberá detallar sobre qué pasará con todos aquellos que no logren pasar ese primer filtro, porque será el grupo más grande, vulnerable, que no regresará a su país.
Se cree que durante ésta semana y media que falta para esa fecha, se confirme esa estrategia que hasta ahora sigue siendo una sola propuesta y se explique también las acciones que cada país deberá de adoptar, incluyendo a México. EL ORBE / Ildefonso Ochoa Argüello