Ares de Parga, el Rescatista
Enrique Beas
Es la historia sin fin. La Selección Mexicana quiere, con una fórmula de las mismas relaciones y el mismo club, domar a la bestia.
Ellos saben que el negocio es sano, fuerte y que es la única Selección de segunda categoría que tiene rentabilidad Top.
Ojalá que abran los ojos, no se queden sólo con las ganancias del mercado estadounidense y tengan algo de sensatez, eso que falta en las juntas directivas de nuestro amado deporte.
Luis Castillo, en Reacción en Cadena, nos decía que habrá un Comité integrado por América, Chivas, Santos, Xolos y Necaxa, que va en lugar de Pachuca, para tener control sobre Rodrigo Ares de Parga.
Conocí en un desayuno a Rodrigo y -sin duda- es un tipo que va por todas, pero -con todo respeto- es más de lo mismo, a menos que tenga una fórmula que haya trabajado desde su intento de proyecto en los Gallos. Es un tipo controvertido, que seguramente dará mucho de qué hablar.
Pero el tema no es el eje protagónico de los de cuello blanco, sino el verdadero trabajo y la evolución que debería existir en la cancha.
Para eso, las respuestas son las mismas desde hace 30 años, y aún no se quieren o no les conviene percatarse de éstas, para seguir operando y administrando de la misma manera.
Nadie ha querido llegar a profundidad, porque la cofradía de amigos y rivales ayuda a llevar la fiesta en paz.
Vendrán horas clave para el futuro inmediato de la Federación Mexicana de Futbol y todo parece indicar que será atole con el dedo, más pan chopeado en el mismo café ligero, envuelto para regalo, y para aprovecharse de la nostalgia de unos paisanos de segunda y tercera generaciones, quienes mantienen una maquinita de billetes vestida de verde y no un proyecto deportivo de Selecciones Nacionales que compitan para buscar la trascendencia en los torneos.
Espero equivocarme, pero como lo he dicho y escrito desde hace 20 años que me dedico a esto: Que tanta crítica ayude a exponer un poco los males, pero -al parecer- todos están felices con el bono que dejó Qatar y da igual haberse quedado en fase de grupos.
¡Bienvenidos, bienvenidos! A los días en los que muchos nos venderán al rescatista Rodrigo Ares de Parga. Sun