En el segundo trimestre del presente año, 35% de la población se encontraba en situación de pobreza laboral, es decir, no contaba con el ingreso laboral suficiente para adquirir la canasta alimentaria para cada integrante del hogar, informó el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
Con este resultado, la pobreza laboral en el país se ubicó abajo del nivel de 36.6% reportado antes de la pandemia y de 35.8% de los primeros tres meses del año, llegando a su menor porcentaje desde que hay registros comparables, en 2008.
Entre el primero y segundo trimestres de 2024 la pobreza laboral disminuyó en los ámbitos rural y urbano, aunque en mayor medida en el primero, al pasar de 49.6% a 47.6%, mientras que en el segundo pasó de 31.4% a 30.9%.
En el mismo lapso la masa salarial real aumentó 1.8%, y por ámbito de residencia el incremento fue de 4.3% en zonas rurales y 1.4% en las urbanas.
En 27 de las 32 entidades federativas se presentó una reducción de la pobreza laboral entre el primero y segundo trimestres de 2024. Destacaron Durango, con baja de 4.3 puntos porcentuales; Querétaro y Yucatán, con 2.8, así como Chihuahua y Tlaxcala, con 2.7 puntos porcentuales.
En contraste, las tres entidades con mayor aumento durante el mismo periodo fueron Guanajuato, con 2.9 puntos porcentuales; Tabasco, con 2.7, y San Luis Potosí, 1.7 puntos porcentuales.
En el segundo trimestre de 2023 la pobreza laboral fue de 37.8%, por lo que la contracción anual fue de 2.8 puntos porcentuales.
La disminución entre el segundo trimestre de 2023 y el mismo periodo de este año en la pobreza laboral se dio en un contexto en que el valor monetario de la canasta alimentaria vio aumentos de 5.8% y 5.7% en los ámbitos rural y urbano, respectivamente, mientras que la inflación general anual promedio fue de 4.8%.
Los alimentos y bebidas consumidas fuera del hogar, el jitomate y la cebolla fueron los tres productos con mayor incidencia en la variación porcentual anual del costo de la canasta alimentaria urbana y rural. El jitomate y la cebolla tuvieron una incidencia superior en el ámbito rural que, en el urbano, mientras que los alimentos y bebidas fuera del hogar tuvieron una mayor incidencia en las ciudades.
La reducción anual de la pobreza laboral en el segundo trimestre de 2024 se dio ante un aumento en el empleo, con 805.2 mil personas ocupadas más, así como un incremento en el ingreso laboral per cápita de 8.9%, el cual contrasta con el aumento en el costo de la canasta alimentaria, superior a la inflación anual.
En el segundo trimestre del año, el ingreso laboral real promedio de la población ocupada a nivel nacional fue de 7 mil 441.06 pesos al mes, sin considerar la inflación. Los hombres ocupados reportaron un ingreso laboral real mensual de 8 mil 137.81 pesos y las mujeres de 6 mil 450.51 pesos, con una brecha en el ingreso laboral de 1.3 veces.
Además, la población ocupada formal reportó en el segundo trimestre de 2024 un ingreso laboral mensual promedio de 10 mil 513.82 pesos, lo que significó el doble de las percepciones de los informales, que promediaron 5 mil 119.51 pesos. Sun
Baja Pobreza Laboral a 35% de la Población
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