Campesinos Dejan de Trabajar Gracias a Programas Sociales; Productores de la Región se Quedan sin Mano de Obra
Ernesto L. Quinteros
Con poquito se vive en las comunidades rurales de la región del Soconusco. Y es que, gracias a la distribución de recursos económicos a través de diversos programas sociales por parte del Gobierno Federal, los campesinos están dejando de trabajar en el sector agrícola.
No es que ya hayan abandonado la pobreza, más bien en la actualidad han generado una mayor dependencia de los programas sociales, y con la aportación económica mensual que reciben les basta para vivir.
Este fenómeno social lo están visualizando los productores de la región, ya que se están quedando sin mano de obra, y cada vez es más difícil encontrar gente que quiere levantar las cosechas, ya sea de plátano, banano, soya, maíz, café, frutales, y más.
Hay casos de personas que con seis mil o 9 mil Pesos mensuales, les es suficiente para subsistir.
En pocas palabras, la población en vez de visualizar el apoyo económico como una aportación económica que les puede ayudar a realizar otras actividades, incluso emprender algún negocio, están prefiriendo no trabajar.
Otro factor que también está contribuyendo a la falta de mano de obra en el campo de la región Soconusco, es que los guatemaltecos ya no vienen a trabajar como antes a esta zona, porque el Quetzal está más caro que el Peso Mexicano.
Para que se dé una idea estimado lector, si usted cambia 100 Pesos por Quetzales en Guatemala, solo le dan 35 Quetzales.
Este cambio de moneda no les favorece a los trabajadores chapines, por eso están decidiendo ya no venir a trabajar a la zona agrícola en esta región de Chiapas.
Derivado de esa situación hay casos en donde los productores y finqueros, al no tener gente para levantar las cosechas, su siembra la dejan en los campos y se echa a perder.
Para colmo de males, también los diferentes cultivos que se cosechan en esta región han perdido su valor.
Los precios de los diferentes productos agrícolas han caído significativamente, al grado que los productores ya no tienen utilidades,incluso hay casos en donde con dificultad sacan lo que invirtieron.
Y si a eso se le sumamos que en la actualidad los jornales (sueldos de trabajadores) también han aumentado al doble o más, se dificulta más la situación. En el último sexenio el pago por jornal pasó de 100 Pesos diarios a 200 Pesos. En algunos casos hasta más.
Esto ya no hace redituable lo que se produce en los campos del Soconusco.
Según testimonios de productores de esta región, se estima que el 50% de las cosechas se han perdido por la falta de mano de obra. ¿Alguien dijo que quería un cambio?
Migración de jóvenes en el medio rural.
Otro dato muy trisque que dan los productores, es que los jóvenes en el medio rural han migrado a otras ciudades del país, sobre todo a la zona norte, en busca de mejores oportunidades.
Esta situación complica el relevo generacional entre los productores del campo en esta zona, en donde la gran mayoría de la población que trabaja en el campo, es de 60 años para arriba.
Por lo que sería importante que las autoridades empezarán a analizar lo que sucede en la denominada “fábrica de alimentos”, la cual ya está en riesgo.
En esas condiciones, es muy difícil hablar de una soberanía alimentaria, como lo comentan las autoridades federales en la publicidad oficial.
Por hoy ahí la dejamos, nos leemos mañana.
¡Ánimo!
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