Tapachula, Chiapas; 11 de Diciembre del 2022.- Aún cuando ya hay leyes que las protegen, sobre todo aquellas que están en peligro de extinción, las agresiones de la gente en contra de reptiles, sobre todo de serpientes, ha ido en aumento, reveló Jonathan Iván Vázquez Salaz, encargado de un acuario de la localidad.
Al cuestionarlo sobre el desconocimiento que existe por parte de la población en cuanto a las serpientes venenosas y las que no lo son, dijo que han concientizado a las personas para que no hagan actos inhumanos en contra de los animales, «porque en sí, el cuidado y el manejo de las serpientes dentro de la vida silvestre es considerado como un gran aporte dentro de la naturaleza, ya que controlan las plagas como roedores, ratones, conejos entre otros».
Hay un incremento en actos violentos contra esos reptiles, hasta su sacrificio, «aún cuando ayudamos a la población brindando un servicio para poder controlar ese tipo de ejemplares. Hay un alza en las mortandades sobre animales silvestres», reconoció.
Dio a conocer que en la localidad y regiones aledañas, mayormente sacrifican lo que son boas constrictoras, mayormente conocidas como mazacuatas, «cuando este tipo de ejemplares solamente hace el control de plagas, como los roedores en terrenos baldíos, entre otros, y de igual manera algunas que se llaman bejuquillas, que se encargan de comer también ratones y algunas aves».
Recordó que la falta de conocimiento que en torno a ese tema se debe a que los ancestros las consideraban muy malas y que ese tipo de culturas se ha llevado de una generación a otra.
Al hacer un balance sobre el número de sacrificios de ese tipo de reptiles en los últimos meses, al menos en Tapachula, calculó que ha habido un aumento en alrededor del 15 por ciento.
«Cuando hablamos de víboras, mayormente las consideran como muy letales y peligrosas. Pero en sí, tampoco llegan a serlo si no las molestamos”.
En la zona, las especies venenosas de mayor peligro, según indicó, son las nauyacas, corales y víboras de cascabel, que se pueden encontrar en las regiones más cálidas. EL ORBE / JC