*Montan Casas de Campaña en las Inmediaciones de las Oficinas Migratorias.
Tapachula, Chiapas; 22 de Noviembre del 2024.- La crisis migratoria en Tapachula, en la frontera sur de México, sigue agudizándose con miles de migrantes viviendo en situación de calle y luchando por satisfacer sus necesidades más básicas. En medio de esta emergencia, algunas calles de Tapachula se han convertido en su hogar temporal.
Esta situación se puede visualizar en las inmediaciones de las oficinas de Regulación Migratoria del Instituto Nacional de Migración, al sur de esta Ciudad, en donde los migrantes han montado casas de campaña y espacios para descansar en lo que esperan una respuesta a sus solicitudes de asilo, refugio o un salvoconducto que les permita salir de esta zona fronteriza.
Inés Flores, de origen venezolano, manifestó que lleva quince días de haber entrando a territorio mexicano, se encuentra viviendo frente a una vivienda en la colonia Procasa, y no ha podido realizar su trámite de CBP One.
Hay tramitadores que ofrecen ese servicio pero cobran 200 Dólares por persona, dinero que no tienen, así como carecen de los servicios más elementales, y ningún organismo internacional ha acudido a apoyarlos.
En su caso, dijo que su celular no aplica la página para tramitar su CBP One, por lo que decidieron quedarse cerca de las oficinas de regulación del INM, en espera de apoyo de las autoridades mexicanas pues no es la única, hay muchas personas extranjeras en las mismas condiciones.
En su mayoría se trata de los extranjeros que viajan en condiciones muy deplorables, sin dinero, ni la posibilidad de poder rentar un cuarto, por lo que duermen y realizan sus necesidades fisiológicas en la vía pública.
Además de enfrentar condiciones insalubres, los migrantes demandan apoyo en alimentos, seguridad y atención médica, así como la agilización de sus trámites migratorios mediante la aplicación CBP One.
La situación exige una respuesta urgente de las autoridades federales y de organismos internacionales para garantizar tanto la dignidad de las personas migrantes como la convivencia armónica con la población local.
Mientras tanto, todos los días llegan a esta zona fronteriza cientos de migrantes de diversas nacionalidades. EL ORBE/ Carlos Montes