*Con Tecnología Accesible y de Bajo Costo.
Tapachula, Chiapas; 4 de Julio de 2025.- Frente al creciente problema de contaminación en los ríos del Soconusco, un grupo de estudiantes de la Escuela Preparatoria Número 6 ha desarrollado una innovadora propuesta ecológica: el uso de biofiltros como alternativa sustentable para el tratamiento de aguas residuales.
El proyecto, impulsado bajo la guía de la ingeniera biotecnóloga Gabriela Velázquez Trejo, busca convertir a los jóvenes en agentes de cambio en sus comunidades, apostando por tecnologías accesibles y de bajo costo que puedan aplicarse desde los hogares.
“La contaminación del agua es un desafío que aumenta cada día, principalmente por descargas domésticas, industriales y agrícolas. Los biofiltros son una opción viable, económica y sustentable para enfrentar este problema”, señaló la ingeniera Velázquez, encargada del proyecto.
Además, se contempla el uso de humedales artificiales con plantas nativas, capaces de remover químicos, colorantes y eliminar los malos olores del agua contaminada.
“Queremos que la gente sepa que estas tecnologías no solo purifican el agua antes de que llegue a los ríos, sino que también permiten su reutilización en actividades agrícolas, lo que amplía su impacto positivo”, agregó.
Uno de los principales objetivos del proyecto es encontrar materiales de bajo costo y alta eficacia para que estos biofiltros puedan ser replicados fácilmente por las comunidades.
Con una vida útil de hasta 10 años y mantenimiento mínimo, estos sistemas representan una solución ambiental con gran potencial para ser implementada a nivel comunitario.
“Nos entusiasma ver cómo los estudiantes se están involucrando activamente en la protección de su entorno. Este tipo de iniciativas pueden marcar una gran diferencia en la salud ambiental de nuestra región”, concluyó.
El proyecto ha despertado el interés de organizaciones locales y se espera que en los próximos meses pueda ser presentado a nivel regional, con el objetivo de escalar su aplicación a otras comunidades afectadas por la contaminación hídrica. EL ORBE/Nelson Bautista