Seis años han pasado desde que Diego Luna protagonizó, junto a Felicity Jones, el filme «Rogue One: una historia de Star Wars», y aunque no parecieran tanto tiempo, al actor mexicano la edad le ha pasado factura. A sus 42 años, Luna sigue siendo considerado como un hombre joven, sin embargo, el mismo reconoce que hay cosas que eran mucho más fáciles de hacer a los 30, sobre todo cuando de trabajo físico se trata.
Ahora, el llamado «charolastra» es la figura central de la nueve serie de Disney+, «Andor», y en conferencia de prensa reveló que, aunque el personaje que interpreta en la trama ya es muy conocido para él, en esta ocasión sí tuvo algunas complicaciones para interpretarlo. “Voy con los stunts donde tienen una increíble instalación y cosas para escalar, brincar, caer y rodar. Voy como ‘hagamos algo simple, necesito regresar a esto’, y pretendo que soy diez años más joven, que es lo que tengo que hacer en este show, y la mañana siguiente estaba como ‘mierda, voy a tener que renunciar a este trabajo, ya no puedo con esto’”, dijo. Diego, compartió con la prensa internacional que esto sucedió el primer o segundo día en que llegó a los estudios Pinewood, donde se filmó la serie, y cuando aún estaban en preproducción. SUN