¡Los Nuevos Inquilinos!
Darinel Zacarías
“No permita la virgen que tengas poder, sobre lágrimas, egos, haciendas (…) No te pases un pelo de listo, no inviertas en cristos, no te hagas el tonto”
Joaquín Sabina
En las 122 aldeas de Chiapas existe una sola realidad y la mayoría de los aldeanos la persiguen en cada proceso electoral, que consiste en que los ayuntamientos sea la única generadora de empleos.
Debemos estar muy abusados estimados lectores, para calificar el actuar de los nuevos inquilinos de las llamadas “cajas de cristal”. Ya la parentela de estos se siente tocada por Dios. Por ente, zopilotean la chuleta.
El nepotismo no debe ya, rebasar la transparencia en la cuadratura de las plantillas laborales. Es la advertencia del nuevo gobernador de Chiapas, Rutilio Escandón.
Así que señores Ediles…¡abusados!, que si quieren consentir a su parentela, hay que “disfrazar” bien la fuga de recursos que serán destinados para criarlos.
Tienen tres años para servirse con el cucharon. Y de ustedes depende que la ciudadanía los recuerde como buenos gobernantes o de plano, los incrimine con adjetivos despectivos.
Es bien claro que el nepotismo no lo puede frenar ni el poder humano ni alguna ley superior o algún embrujo. Le buscan para no dejar a la orfandad a sus séquitos.
Es la mecánica que utilizan los Ediles para mantener en la teta presupuestal a sus hijos, nueras, yernos, sobrinos, cuñados, tíos, compadres, quelites y demás familiares.
De los constructores no se diga, ya desfilan en las casas de los nuevos inquilinos. Con folder bajo el sobaco, estimaciones, grupos y orquestas para sus comilonas, fajos y más fajos, y uno que otro regalito, el objetivo: obra para acá.
Y como nadie da paso sin huarache, ya saben que quién cobra vida, es rayar y dibujar bien el jugoso diezmo, las regalías, las facturas alteradas y demás bussines.
Y lo que ya saben…el viejo rito se pone en marcha: ¡obra aprobada es obra peinada!, ¡obra iniciada es obra rasurada!, ¡contrato dado, diezmo cobrado!, ¿o no es así?
Pero la nueva inquisición les va caer, según dicen. Porque el nuevo inquilino de palacio estatal ya sentenció “se combatirán prácticas dañinas como la corrupción, la impunidad, el tráfico de influencias y el nepotismo”.
Por lo pronto, los llamados Juegos del Hambre se viven desde este domingo en las alcaldías de Chiapas.
Desfiladero de desempleados en las casas de los Ediles Electos, muchos de ellos mercenarios, lugartenientes de la polaca que desean seguir pegados en la ubre presupuestal.
De la austeridad, ya nadie habla, nadie quiere tocar el tema. Si usted fue Edil electo, le sugiero un favor ¡Ponga quietos a sus familiares! La gente merece respeto.
La ciudadanía observa, constata y se ofende cuando los familiares, queridas o queridos, amigos y secuaces se adueñan de la nómina.
Por lo pronto, el tufo de la cuarta transformación ya se siente. Efectiva, real, verdadera o acto simulador. Eso sí, quién sabe.
PD1: En Tuxtla Chico, Deysi González Aguilar asumió la Presidencia Municipal. Hay grandes y valiosas expectativas de darle un rumbo diferente a la Tierra de Dios, mote que distingue este fronterizo municipio. Con la ayuda de los rusos, no se descarta que su esquema de trabajo se vea reflejado en grandes acciones de bienestar. Mayor seguridad, obra pública, salud, turismo, deportes, cultura y servicios públicos. ¡Éxito!
PD2: La que no tiene llenadero es la CFE, el caso concreto de abuso se notó en querer obligar a las alcaldías salientes a inflar las facturas de cobro del último bimestre de servicio. Por eso el cólera de los cortes masivos. Para nadie es nuevo que la paraestatal se lleva gran parte del presupuesto de los gobiernos municipales. Chiapas, merece un trato especial y Andrés Manuel López Obrador, lo sabe.
¿Quién dijo que tengo sed?