Ciudad de México, marzo 18.- En medio de una temporada irregular, Cruz Azul encontró estabilidad con Ricardo Ferretti, y lo confirmó con el triunfo sobre el Atlético de San Luis (1-0), el segundo consecutivo y el tercero en la era del «Tuca».
Ya son cuatro partidos sin derrota para La Máquina en el Estadio Azteca, tres triunfos y un empate, todo con el sello característico, con el estilo de Ferretti: hacerse de la pelota, dominar el juego y aprovechar la que se tiene, no más. Lo suficiente para sumar.
Durante la primera mitad el equipo local se mostró superior en todos los aspectos y tuvo la iniciativa para crear situaciones de peligro, siendo un poste de Ramiro Carrera la jugada más destacada.
El equipo dirigido por André Jardine logró bloquear el ataque de Cruz Azul por las bandas, una de las herramientas más efectivas del conjunto cementero, y cuando se vio amenazado, el experimentado portero argentino Marcelo Barovero respondió con creces. Para la segunda parte, los dos técnicos brasileños decidieron mover las fichas en sus equipos con cambios ofensivos.
Mientras «El Tuca» modificó hombre por hombre en sus dos delanteros para darle lugar a Michael Estrada e Iván Morales, Jardine buscó más profundidad con la entrada de Vitinho y Ángel Zaldivar.
El juego se neutralizó, pero sobre el final, Barovero derribó a Michael Estrada dentro del área y el árbitro marcó el penalti que el chileno Iván Morales hizo gol (82’), su segundo en un año con el equipo celeste. Acción suficiente para poner el 1-0 definitivo y asegurar el triunfo cementero. SUN