Ciudad de México, febrero 22.- Mientras Hugo Camberos se enfilaba a ejecutar el saque de esquina, Luis Romo se desgarró la voz en pos de que sus compañeros se colocaran en una peculiar posición: todos amontonados en el vértice izquierdo del área grande.
La defensa del Pachuca no entendió qué pretendía el Guadalajara. Lo entendió menos de un minuto después, cuando Camberos disparó al arco de Carlos Moreno y Romo metió la rodilla izquierda para desviar la trayectoria del esférico y marcar el gol (36′) que significó la victoria de las Chivas (2-1).
Justo cuando más lo necesitaba, el Rebaño Sagrado obtuvo tres puntos que lo regresan a la batalla por los puestos a Liguilla.
No sin antes sufrir demasiado y estar envuelto en la polémica.
Porque su primera anotación generó muchas dudas. Justo después de quejarse de maltrato arbitral, el Guadalajara pareció beneficiado en una acción muy dudosa, esa que finalizó con el tanto de Alan Pulido (19′).
El goleador se encontró con una pelota dentro del área hidalguense, pero estaba en claro fuera de juego cuando se presentó el rebote en Alfonso González. Tras su definición, la asistente Enedina Caudillo levantó la bandera y el árbitro Guillermo Pacheco invalidó el tanto.
Tras la revisión en el VAR, se determinó que Pulido no estaba en fuera de juego cuando Mateo Chávez tocó la pelota (antes del rebote en González), por lo que el gol se dio por bueno. Ahora, la decisión se dio en su favor.
La multitud en el estadio Akron explotó. Había quedado en el olvido la tempranera anotación del propio Ponchito González (7′), a gran jugada de Oussama Idrissi.
La segunda mitad careció de la intensidad de la primera, aunque la expulsión de Miguel Tapias (80′) otorgó dramatismo, ya que los Tuzos se fueron con todo en busca del empate.
No lo lograron y el Guadalajara se llevó los tres puntos, con polémica incluida. SUN