Por Ernesto L. Quinteros
Espacios Públicos Abandonados en Tapachula
Diferentes espacios públicos en la ciudad de Tapachula se encuentran abandonados, y todo indica que así continuarán, ante la falta de un proyecto viable por parte de la administración municipal que preside Oscar Gurría.
No existe ni siquiera una propuesta o programa municipal que permita dar vida y utilidad a diferentes edificios y áreas verdes como parques, así como fuentes que existen en diversos puntos de la ciudad, que dan una pésima y deplorable imagen urbana.
El responsable de su mantenimiento, históricamente ha sido el Gobierno Municipal de Tapachula, pero desde la administración que encabezó el nefasto alcalde Neftalí Del Toro a la fecha, siguen en constante deterioro.
Uno de estos tantos espacios es el “Parque Ecológico”, que cuenta con nueve hectáreas de terreno, por lo que es considerado uno de los pulmones de la ciudad, el cual se ha convertido en todo, menos en un parque. Ahí hay un gigantesco estacionamiento, y hoy sirve como acceso a la feria, abunda la basura, la poca infraestructura que se tenía ya está obsoleta por falta de mantenimiento, además de ser una zona insegura.
Entre los estudiantes de preparatoria y universidad de la zona se comenta que dicho parque, también es utilizado como motel al aire libre, en donde muchos jóvenes enamorados y atrevidos llegan a echar pasión, aprovechando la obscuridad y la poca vigilancia.
En este mismo espacio en la administración pasada, también fue el escenario de una tragedia, pues en este lugar fallecieron dos empleados del Ayuntamiento debido a la presunta negligencia de funcionarios y del mismo ex edil Del Toro.
En aquella ocasión, se informó que los hoy occisos perdieron la vida por inhalar monóxido de carbono, que emitía un motor de gasolina (bomba) con la que sustraían agua de una gigantesca cisterna. Pero casi nadie dio a conocer la otra versión, en donde se aseguraba que, con mucha anticipación, los empleados municipales que tenían bajo su responsabilidad un vivero de plantas en el lugar, habían informado que dicho motor que servía para regar agua ya casi no funcionaba, además de que ni si quiera les surtían gasolina, la cual incluso en ocasiones compraban con recursos propios.
Lo demás, es ya una historia muy lamentable, que aún muchos recuerdan con tristeza, ya que las muertes de los empleados de Parques y Jardines quedó impune, y fue algo que nunca debió suceder, en donde incluso, ningún sindicato de los trabajadores del Ayuntamiento protestó ante el cúmulo de irregularidades y maltratos que sufrieron los empleados en aquella ocasión.
Y hago el comentario, porque en ocasiones las “omisiones” cobran facturas muy fuertes, e incluso pueden cobrar vidas de personas.
Es por ello que el Gobierno Municipal que preside Oscar Gurría no debe de omitir los constantes señalamientos de la población en diferentes temas.
La decadencia y la pésima imagen urbana que presenta la ciudad para visitantes nacionales y extranjeros, es una realidad que no se puede esconder, y que urge una pronta atención.
Desgraciadamente el edil, a la fecha, sigue cargando con muchas culpas, debido a que no ha querido informar en qué condiciones recibió la administración municipal. ¿Cuál será el motivo?
Los que se dicen auténticos militantes del Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA) ya empiezan a sospechar que hubo una negociación económica con el ex edil Del Toro. ¿Será?
Cierto o no, el que calla otorga. Pero la factura mayor la está pagando la población que hoy exigen más y mejores servicios municipales.
¿QUIÉN COBRA EL DERECHO DE PISO?
En repetidas ocasiones la población tapachulteca se pregunta ¿Quién cobra el derecho de piso a miles de comerciantes ambulantes que existen por toda la ciudad?
El cuestionamiento viene, porque la mayoría de las veces se culpa de invadir calles y banquetas a los comerciantes informales, pero casi siempre lo hacen con la anuencia de funcionarios de la Secretaría de Servicios Públicos, y son los que a final del día tienen un redituable negocio con la venta de espacios en las calles, no sólo en el centro de la ciudad, si no en diferentes puntos de la geografía local. Ejemplos podríamos dar muchos.
Todo este tema ha revivido con la protesta que realizaron los “inspectores de la SESEPU”, quienes se quejan de malos tratos de sus jefes, de que tienen horarios de hasta diez horas por turno y que hasta el chaleco que portan, lo tienen que utilizar todo sucio y hediondo, ya que se los rolan entre los mismos empleados de la dependencia.
Y que, en pocas palabras, están como chuchos de carnicería, porque solo ven pasar los filetes, pero nadie les comparte uno.
Mientras que ellos, los inspectores, son los que hacen el trabajo sucio y tienen que andar carrereando canasteras y peleando con los ambulantes.
Bueno pues resulta que uno de estos servidores públicos, me confió que ahora el modo de operar las cuotas diarias y semanales que pagan los comerciantes informales en diferentes puntos de la ciudad, ya cambió, pues están evitando pasar a cobrar en efectivo, y únicamente pasan a checar el depósito que hacen en las tiendas que están por toda la ciudad, ya saben, las que están “a la de la vuelta de la esquina”. ¡Qué bien! Ingeniosos los muchachos, Yo siempre he dicho que hay talento, solo hay que apoyarlo.
La pregunta del millón es ¿Tendrá conocimiento el alcalde Gurría, o también le están picando los ojos en este negocio? ¿En manos de quién quedan los depósitos?
Por hoy ahí la dejamos, nos leemos mañana. ¡Animooo!
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