Guerra Fría
Oscar Sieber
@neosieber
Pawel Pawlikowski, es un cineasta polaco que al ganar la máxima presea, a Mejor Película Extranjera en los Oscars del 2014 por su película “Ida”, obtuvo junto con ello, mayor visibilidad en el medio cinematográfico internacional.
Guerra Fría es su más reciente obra, y su participación fue muy notable en las diferentes y principales contiendas cinematográficas; aunque corrió con la mala suerte de ser eclipsada por la ya tan laureada “Roma” de Cuarón en los premios de la Academia, obtuvo pleno reconocimiento en toda Europa, desde los premios de Cannes como Mejor Director, hasta los Premios de Cine Europeo donde ganó varios rubros entre ellos a mejor película.
Guerra Fría subsiste por su fuerza artística. Por la compostura de su historia: un amor verdadero que se fragua en tiempos de guerra, entre los 50’s y los 60’s, época difícil sobre el que se esboza la imposibilidad de su consumación.
Entre otras cosas, en ella existen grandiosas elipsis; uno de los elementos más importantes que hacen del cine su más notorio lenguaje. Es decir, la cinta contiene una retahíla de vacíos de información que hay entre cortes de una secuencia a otra, o de una escena a otra, dejando una comunicación subjetiva y bien elaborada para que el espectador construya una serie de reflexiones. La película interactúa como en un juego de tenis.
También hay otros méritos que hacen de la misma una pieza exquisita, como lo es su fotografía en blanco y negro captada con gran maestría; y las actuaciones que van de la mano de dos histriones escrupulosamente seleccionados, capaces de comunicar y hacernos sentir lo que existía en el fondo de ellos: choque de dos personalidades en un país y una época donde la vida les exigía hacer muchos compromisos.
A decir de la historia, está basada en la de los padres del director polaco. Aunque no se sabe a ciencia exacta en qué partes hay parecidos a la realidad, lo que la historia supone es que a través de la música se pudo haber propiciado el encuentro. Por ejemplo, en el primer cuadro de la película aparece un músico sonando un aerófono, y ésta imagen se reafirma con las vocaciones de los protagonistas: él es un director de música, y ella, cantante.
Guerra Fría es una historia sobre la mecánica del amor, el reencuentro, la pasión y el esfuerzo de vivir al lado del verdadero amor, a pesar de la distancia y los tiempos de guerra.
