Economía Ahorcada
Oscar D. Ballinas Lezama
Mientras el Presidente de México y su cuarta transformación echan las campanas al vuelo, jurando y perjurando que en el sistema económico del país todo va viento en popa, miles de empresas se están asfixiando en su débil economía.
Metido en su propio mundo de ‘otros datos’, Andrés Manuel López Obrador afirma que la inversión extranjera directa en la nación azteca está creciendo, como jamás había pasado en su historia; según el político tabasqueño, todos los mexicanos están felices con su administración, añadiendo que en su Gobierno, hay paz social y no existe inestabilidad política.
Cubiertos con el manto de humanitarismo, regalan miles de millones de Pesos a los Gobiernos de países centroamericanos, entre los que sobresalen: Honduras, Nicaragua, El Salvador y Guatemala, argumentando que en esas naciones hay mucha pobreza, delincuencia y falta de trabajo, demostrando con ello, los de la Cuarta Transformación, que se han coinvertido en candil de la calle, oscuridad de su casa.
Si bien todas las entidades del país están sufriendo los golpes de una mala administración en el manejo de la economía nacional, los Estados de Oaxaca, Guerrero y Chiapas, siguen sobresaliendo entre los más empobrecidos y marginados por la Federación, sobre todo en la frontera sur en donde se ha formado por disposición gubernamental, el ‘albergue para migrantes’, más grande del país.
Ahora los chiapanecos no solamente tienen que luchar por su sobrevivencia y rascarse con sus propias uñas, por la falta de apoyo suficiente de la Federación en obra pública, así como de apoyos fiscales, como los otorgados a las entidades de la frontera norte en donde además los precios de las gasolinas y de la energía eléctrica son más bajos que en esta región del sur, amén de que allá se pagan mejores salarios.
Para nadie es secreto que en los últimos doce meses la región del Soconusco ha sido afectada por el aumento sin control de la migración de diversas partes del mundo, principalmente de Centroamérica, lo cual ha trastornado económica y socialmente esta frontera sur de México, creando el caos con el aumento sin medida de la inseguridad, el desempleo, las pésimas condiciones de salubridad, aumento de la prostitución y en consecuencia de enfermedades graves como el Sida y la sífilis, muertes por el control del narcomenudeo, feminicidios, etcétera.
Esta frontera que sigue siendo olvidada, cuyos municipios cercanos al río Suchiate, han sido rebasados por la falta de servicios e infraestructura para atender la marea humana que no deja de arribar a esta región, no obstante, la cacaraqueada ayuda económica tomada de los impuestos de todos los mexicanos, para ayudar a esos países que no parecen tener ninguna intención de parar la migración hacia México.
Aunado al problema de la migración, la presión del presidente gringo, Donald Trump, el Gobierno mexicano ha sido obligado a cambiar su política migratoria nacional de abrazos, evitando ahora que sus ‘invitados’ crucen el Suchiate sin llenar el protocolo solicitado por las autoridades del INM, no obstante eso, los extranjeros indocumentados siguen siendo encapsulados en Tapachula, en donde les obligan a permanecer con el ofrecimiento de apoyarles con programas asistenciales, que hasta ahora, han sido insuficientes para la sobrevivencia de casi 70 mil migrantes que llevan meses varados en este municipio.
Las obras cacaraqueadas para esta región de la costa chiapaneca, entre ellas la ampliación de la carretera Costera a Puerto Chiapas, la rehabilitación del aeropuerto de Tapachula, la carretera Pijijiapan-Tuxtla Gutiérrez, siguen viéndose muy lejanas; habrá que esperar a que el nuevo Mesías visite el Soconusco y recuerde su compromiso hecho en campaña, lo que aún está pendiente por cumplirse en esta zona del Soconusco, tierra en que la gente ya no ve lo duro, sino lo tupido.