“Somos otros, ya no somos los mismos”. (Roberto Albores)
Encrucijada Política
Oscar D. Ballinas Lezama
“México merece un golpe de timón; es tiempo de convocar a la unidad nacional y construir un acuerdo político para enfrentar la pandemia, la inseguridad y la economía”, afirmó Roberto Albores Guillén, exgobernador de Chiapas.
Reconoció que el 2021 será un año emblemático para México, un año de grandes retos y desafíos: “Venimos de una tormenta que ha provocado muerte, desolación, angustia, miedo y desamparo económico, una verdadera calamidad nacional”, apuntó el político comiteco.
Los mexicanos somos sobrevivientes del infortunio y que debemos prepararnos para proteger nuestra vida, ya que una vez más nos estamos enfrentando a los fantasmas que aún recorren el mundo: pandemia, inseguridad, parálisis económica y, para colmo, frentes fríos, huracanes y tormentas que han provocado grandes daños a la población, por fortuna nada es eterno, pronto vendrán la calma y el nuevo amanecer, señaló en una misiva que atentamente nos envió.
Albores Guillén asegura que el Gobierno mexicano está en una encrucijada y que llegó la hora de la verdad, el momento de dar resultados concretos; el reto es mayor y su prueba, definitiva, abundó.
Explicó que todos estamos en el mismo barco, que somos viajeros en un mar proceloso y que a todos nos conviene llegar sanos y salvos a buen puerto; luego precisó: “El Gobierno debe asumir su responsabilidad constitucional de salvaguardar nuestra existencia y garantizar nuestras libertades, salud, seguridad y oportunidades de realización social; es el momento de que el presidente Andrés Manuel López Obrador debe dar un golpe de timón y convocar a la unidad nacional”.
En estos tiempos de crisis el compromiso es de todos, nadie debe estar al margen y desatender este reclamo nacional; el clima político es turbulento, ya que existe una polarización que está tomando niveles peligrosos y hay temor, tristeza y coraje en el alma mexicana, señaló.
Una propuesta inteligente del Gobierno sería llamar a serenar los ánimos y proponer una tregua a la beligerancia, una iniciativa que de ninguna manera debe proponer cancelar el debate actual, sobre diversos asuntos de litigio político y el derecho de los grupos a disentir, hacerlo fuerte y hasta con estridencia, ya que es el signo de la democracia, dijo Albores Guillén.
Reconoció que hay temor que esta iniciativa no tenga futuro en el ánimo de López Obrador, quien tiene otra realidad, su gobierno va de frente sin dar espacio a ninguna negociación, está convencido de su razón de ser y su mandato es liquidar el pasado y avanzar en su cuarta transformación.
“México está viviendo un tiempo inédito, se han roto las compuertas que contenían el torrente de un pasado que por años y décadas conformó modas, formas y maneras de comportamiento político; se las llevó el viento, la muerte nos ha cobrado un precio muy alto, miles de hogares guardan luto y lloran a sus muertos, miles de corazones dejaron de latir y eso nos duele y atormenta, pero no podemos dejar pasar la oportunidad de demostrarnos a nosotros mismos, que estamos preparados para defender nuestra vida y nuestro patrimonio”, concluye el exmandatario Roberto Albores Guillén.
Continúa la cuenta regresiva para los candidatos a ocupar cargos de elección popular, en Chiapas el ‘horno no está para bollos’, la pasión empieza a desbordarse y las autoridades electorales deben estar muy atentas, sobre todo, que el 6 de Junio no vuelva a caerse en la compra venta de votos en las colonias marginadas y el área rural, principalmente.
Conforme a la información del INE, presuntamente todos los partidos políticos recibieron varios millones de Pesos para entregar a sus candidatos y estos hicieran una campaña digna, sin embargo, la mayoría de los abanderados o ungidos para participar en este hándicap vienen realizando una campaña pichicatera con el argumento de la ‘austeridad’.
Existe la sospecha de los analistas políticos que ese dinero entregado podría ser usado para la compra de votos el día de la elección, por lo que es necesario que el INE y el IEPC estén con un ojo al gato y otro al garabato, exigiendo cuentas claras del recursos entregado a los candidatos.
Trascendió el rumor que los participantes que se han quedado rezagados, ya no tienen interés en invertir en sus campañas los recursos que emanan de los impuestos del pueblo, pensando quizás en ‘guardárselos’, de ahí la importancia de que las autoridades exijan transparencia de ese dinero y, se informe de ello a la ciudadanía.
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