*Afirma Refugio Bravo Soto.
Tapachula, Chiapas; 7 de Mayo.- Las nuevas disposiciones del Gobierno Federal para la entrega de los apoyos gubernamentales a los campesinos de Chiapas, a partir de este año, fue que solamente podrían inscribirse en un programa anual. Pero, una vez que se han cerrado las ventanillas, la gran mayoría quedó fuera, denunció, Refugio Bravo Soto, juez auxiliar en la zona rural alta del municipio.
En entrevista para rotativo EL ORBE, dijo que la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER), les notificó las disposiciones de la administración que encabeza el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO).
A diferencia de años anteriores cuando los productores en el país podían inscribirse en varios programas que les permitieran simultáneamente combatir plagas, reforestar, renovar plantíos, reducir índices de miseria, contrarrestar la desnutrición y los problemas de salud, entre otros, ahora solamente podrían participar en un solo.
Ante esa situación, los campesinos chiapanecos optaron por reunir los requisitos e inscribirse en el programa “Sembrando Vida”, que contempla el cultivo de árboles maderables y frutales a cambio de una remuneración mensual por determinada superficie cultivada, dijo.
De esa manera, las autoridades realizaron los estudios y se hicieron los padrones, y se esperaba que en estas fechas se empezarían a entregar las tarjetas bancarias con la que los campesinos cobrarían. Sin embargo, vino la desesperanza.
A razón de ejemplo dijo que, en el ejido El Naranjo, enclavado en la zona rural alta del municipio de Tapachula, fueron empadronados inicialmente 120 productores. Pero por alguna razón que aún desconocen, solamente fueron considerados 52; es decir, en ese recorte quedó fuera más de la mitad.
Lo peor vino esta semana cuando las autoridades distribuyeron las tarjetas bancarias para los beneficiarios, ya que, en el caso de esa comunidad, solo vinieron para 40 personas, o sea, un 33 por ciento del censo original.
“Los campesinos en Chiapas nos quedamos como el perro de las dos tortas, ya que, por inscribirnos en un solo programa, como nos dijeron, ahora nos hemos quedado fuera de todos los demás programas gubernamentales, ya que la SADER ha cerrado las ventanillas de recepción de documentos”, explicó. EL ORBE/Ildefonso Ochoa Argüello
