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Después de la toma de posesión de Javier Milei, el ultraliberal que ganó al peronismo en Argentina, ya se comienzan a ver cuáles serán los cambios que tendrá el estado. No sólo a nivel interno sino en materia de política exterior.
Argentina se encontraba en un proceso que tenía como objetivo la adición a la agrupación económica de naciones conocida como BRICS, una alianza en la cual se encuentran Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica.
Diana Mondino, canciller del gobierno de Milei, firmó una carta de invitación para comenzar con el proceso para adentrarse a la OCDE, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico. Esta alianza económica representa, principalmente, los intereses de los países occidentales.
Como los mejores juegos de casino en España (un país que tradicionalmente se ha comparado con Argentina), que buscan ofrecer el máximo rédito económico con el menor riesgo posible, pero donde sigue existiendo, el gobierno ultraliberal comienza a tomar un camino contrario al de los anteriores gobiernos.
No exento de polémica. Javier Milei tuvo una toma de posesión en la que anunció un “shock” en el país. Unos ajustes que traerán a corto plazo un aumento de la pobreza y una mayor inflación. Todo a la vez que recorta el número de ministerios a la mitad, pasando de 19 a 8.
Milei no es el primero que intenta alinearse con la OCDE. El gobierno de Mauricio Macri inició el proceso para unirse a esta alianza en 2016. Sin embargo, con la entrada de Alberto Fernández al poder, no se mostró un gran interés por los acercamientos a la OCDE.
Otras relaciones internacionales de gran valor en duda
China es uno de los grandes inversores que hay en el país. Con las declaraciones del actual presidente, indicando que no tendrá relaciones diplomáticas con “países comunistas”, existe una gran incertidumbre en cuanto a las relaciones que se tendrán con el gigante asiático.
Ya sucedió con el gobierno de Macri, donde quiso alejarse e incluso paralizar algunos proyectos chinos en el país, como las centrales hidroeléctricas, aunque el poderío asiático finalmente ganó y sacó adelante el proyecto.
Actualmente el país cuenta con reservas de yuanes, la moneda china, que son necesarias para poder hacer el cambio monetario y llevar a cabo el próximo pago de deuda al Fondo Monetario Internacional.
Otro movimiento que ya ha hecho el presidente es el acercamiento en el acuerdo Mercosur-Europa. Alberto Fernández, rechazó el acuerdo, algo que también ha hecho el presidente francés Macrón al considerarlo anticuado. Sin embargo, estas negativas no echan atrás el acuerdo de libre comercio entre ambos mercados.
Se estaba esperando la asunción del nuevo presidente del gobierno para una nueva votación en la que se busca aprobar este acuerdo.
La posibilidad de integrar la OCDE
La postura del presidente con el alineamiento a la OCDE no tiene ninguna repercusión inmediata en materia económica. El proceso para integrar este club lleva años, y puede prolongarse incluso más debido a la situación económica nacional.
La amplia mayoría de los 38 integrantes son países occidentales: Alemania, Australia, Austria, Bélgica, Canadá, Dinamarca, España, Estados Unidos, Finlandia, Francia, Italia, Luxemburgo, Noruega, Países Bajos, Portugal, Reino Unido, Suecia y Suiza. También muchas otras potencias económicas como Corea, Japón, Nueva Zelanda o Israel.
Algunos países americanos, como Chile, Colombia, Costa Rica y México ya forman parte del club y otros como Brasil y Perú tienen acuerdos de ingreso.
En el período de tiempo que Macri estuvo fue presidente del país intentó sin éxito el ingreso al grupo, sólo el tiempo dirá si Milei consigue llevar las relaciones internacionales más allá que gobiernos anteriores.
