Tapachula, Chiapas; 13 de Marzo del 2021.- Ante el abandono y la marginación que se agudizó en la gris administración que encabezó la exalcaldesa, Sonia Eloína Hernández Aguilar, habitantes del ejido La Libertad del municipio fronterizo de Suchiate, han iniciado el protocolo para buscar independizarse.
José Manuel Ovalle Sosa, en voz de pobladores de esa comunidad, dijo en entrevista para EL ORBE que son el ejido más grande de Suchiate, con alrededor de 17 mil habitantes, “y ya tenemos el derecho de movernos y ser un municipio libre y esa es nuestra idea para el futuro”.
Han llegado a esa determinación porque los Gobiernos Municipales que han pasado no han cumplido con las normas que marca la ley del Estado.
Puso como ejemplo que, en los cinco servicios públicos que el Gobierno Municipal debe administrar, está el de salud, y para ello se deben de combatir las bacterias y las epidemias, que pueden tener un excelente escenario para reproducirse en los drenajes.
En el caso de La Libertad, según narró, ese servicio es pagado totalmente por ellos, incluso el tratamiento de las aguas residuales, con alrededor de 25 mil Pesos por concepto de energía eléctrica, otros 7 mil para el pago de cinco trabajadores, entre otros gastos.
En torno a la importancia de lo que producen, señaló que alrededor de cien toneladas de plátano salen de ese lugar todos los días, la mayoría a mercados de exportación, pero que no tuvieron apoyo del Gobierno Municipal, para nada.
Al mencionar a la planta de tratamiento de aguas residuales, reconoció que los filtros coladores llevan al menso cinco años tirados y las bombas deterioradas y pegadas; mientras que el tanque no se ha desazolvado.
En sí, asegura que esas instalaciones dejaron de funcionar desde hace una década, “y estamos afectando a nuestros vecinos de la comunidad de Miguel Alemán, un ejido hermano que produce banano, con los que ya hemos tenido pláticas para pedirles que nos permitan tiempo para que nosotros mismos lo solucionemos, pero son gastos millonarios y el ayuntamiento no nos apoya”.
Para agravar el problema, indicó que llegaron funcionarios de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) y les dijeron que esa planta no tiene registro oficial, como ninguna otra en ese municipio, cuando ese protocolo administrativo corresponde al Gobierno Municipal.
También se refirió a que no se debería de vender bebidas alcohólicas en ese ejido, porque a Ley Agraria así lo marca. Sin embargo, hay 12 cantinas y unas 30 personas que también las venden.
“Ni salubridad, ni el encargado de Alcoholes, ni la misma presidencia municipal le ponen fin al asunto. Lo que quieren ellos es agarrar el dinero. Ahorita les están cobrando 5 mil pesos por cantina y 3 mil pesos a los pocitos o igual más”, abundó.
Asimismo, destacó el incremento en el consumo de drogas, los altos niveles de inseguridad. “En general, estamos olvidados y no es justo porque nosotros producimos mucho y ayudamos a la economía nacional”. EL ORBE / M. Cancino / Ildefonso Ochoa