*Culpan a una Ejecutiva de la Institución.
Tapachula, Chiapas; 03 de agosto del 2022.- Una señora de 73 años de edad y con estudios de primaria, fue defraudada por empleados de un banco local para usurpar su identidad, documento y hasta su firma, para solicitar tarjetas de crédito y préstamos a su nombre, y esconder todos esos movimientos desde la plataforma de la institución desde hace cuatro años y ahora que se ha descubierto todo, hay millonarios adeudos.
Manuel Alberto Piña, uno de los hijos de la afectada, narró al rotativo EL ORBE que acudía de manera constante a ese banco desde el 2018, porque tenía una cuenta de ahorro y se presentaba a cobrar sus intereses, además de que también ahí le mandaban su pensión del Seguro Social.
Según su versión, su mamá decidió que siempre que hiciera esos movimientos buscaría a la misma ejecutiva, Rosario N, quien la atendía y en varias ocasiones le solicitaba que firmara documentos, pero no le explicaba para qué.
«Todo transcurría sin ningún problema, incluso yo llegué acompañar a mi madre a hacer algún trámite bancario, a retirar algún dinero por su cuenta y nos atendía esa persona, muy amable. Sin embargo, a finales del mes de mayo de este año, empezamos a recibir llamadas telefónicas en nuestro domicilio, donde nos señalaban que había un atraso en el pago del crédito», comentó.
Por lo mismo se presentaron al banco y hablaron con la misma persona, quien les comentó que no se preocuparan y que posiblemente se trataba de un error, pero las llamadas de cobro siguieron, Por lo que optaron por buscar al gerente y exponer su caso.
Su asombro fue cuando se enteraron que esa ejecutiva había sido despedida y de paso les corroboraron que «su mamá» había solicitado el crédito en el 2020′, además de dos tarjetas sobregiradas; es decir que pasaron el límite y que ya presentan adeudos por un total de unos 250 mil pesos, más los intereses que se generan cada día .
En el caso de las tarjetas, les informaron que fueron solicitadas desde el 2018 y el préstamo en el 2020. El banco señaló que no pueden hacer nada, porque están los documentos de la señora, con las solicitudes con su firma y comprobantes que se le solicitó.
«Advertimos que la firma fue sin explicarle a mi mamá para qué era. Hay una afectación directa, porque con engaño obtuvieron el consentimiento de mi madre para algo. Fue con dolo y mala fe, abusando de la edad avanzada de mi madre», recalcó al indicar que el caso ya fue presentado ante las autoridades judiciales para que se investigue a fondo y se castigue de manera ejemplar a la responsable.
Se cree que esa ejecutiva hizo compras durante esos cuatro años, realizó pagos y otras acciones usurpando la identidad de la persona, pero que había intervenido la plataforma digital para que la afectada no se enterara, hasta ahora, que los adeudos ya son muy altos.
Los problemas se agudizaron en esta semana, porque ahora el banco le está reteniendo su pensión para utilizar ese dinero como abono, obviamente sin la autorización de la señora, y con ello la dejan en estado de indefensión y sin los recursos para poder sobrevivir, ni pagar.
Dijo que hay confianza en que las autoridades podrán comprobar las acusaciones en contra de Rosario N para detenerla y obligarla a pagar todo, «y lo peor de todo es que estamos seguros de que hay muchas más defraudadas de la misma manera, sin que lo sepan todavía». EL ORBE / JC