Ben Affleck ha peleado cuerpo a cuerpo en los callejones de Gotham, ha rescatado rehenes en Irán y hasta obtuvo un Oscar escribiendo sobre genios incomprendidos. Pero esa experiencia no le sirvió en este momento: se le ve como un hombre dubitativo, rígido, tratando de moverse cerca de una bella mujer… sin mirarla a los ojos. “Requirió, sí, mucho de mí… probablemente no voy a recibir muchas más ofertas de trabajo por mi baile en línea, el teléfono no ha sonado todavía”, dice bromista el actor en entrevista virtual.
El intento de seducción ocurre en «El contador 2», cinta que se estrena el 24 de abril y que lo trae de regreso como Christian Wolff, un contador forense con autismo, mente prodigiosa para los números y entrenamiento militar, pero desarmado ante lo emocional. Ese esfuerzo se tradujo en una escena de baile incómoda y honesta, que revela la vulnerabilidad del personaje… y de Ben.
“Quiere tener una relación con una mujer, pero está tratando de averiguar cómo hacerlo. No se siente cómodo expresándose, no sabe coquetear exactamente -como muchos de nosotros-. No es fácil para nadie descifrar las relaciones, especialmente al principio”, explica el actor.
“Creo que lo encantador de esto es cuando alguien se expone para hacer algo en lo que no necesariamente es genial, pero lo intenta. Y yo no tengo el don natural para el baile; por suerte para mí, no se suponía que fuera bueno, al menos eso espero”, añade entre risas. SUN
El Baile y las Mujeres, el Lado Débil de Ben Affleck
RELATED ARTICLES