* Con Protocolos Sanitarios.
Tapachula, Chiapas; 01 de Agosto de 2020.- La Iglesia Católica en Chiapas reiniciará este domingo sus actividades presenciales en miles de templos ubicados a lo largo y ancho del territorio estatal.
En el caso de la Diócesis de Tapachula, que comprende decenas de municipios de la Costa, Sierra y Frontera Sur, la noticia fue confirmada por el obispo, Jaime Calderón.
Recordó que, en la primera semana de Julio, se suspendió la reapertura de las actividades, debido a que, en buena parte de la jurisdicción eclesiástica de la Diócesis, todavía había un alto índice de contagios y muertes a causa de la pandemia.
Este sábado, se reunió nuevamente con los vicarios foráneos para poder analizar la situación de las contingencias en la región.
«Hemos podido advertir que ya existen condiciones más favorables de salud, superada la etapa más crítica de la emergencia sanitaria, que nos permiten que reiniciemos el servicio pastoral», señaló el prelado.
Aunque dejó en claro que deberá ser «con el compromiso responsable de una reapertura sana, gradual y ordenada del culto y de los espacios pastorales».
Por eso invitó a los feligreses a que reemprendan ya el camino, «pero que lo hagamos en la fortaleza del mismo espíritu que nos anima a caminar juntos, como un pueblo sinodal».
Reconoció que les tomó por sorpresa esta crisis humanitaria de salud, «replegándonos a un confinamiento responsable en medio de sufrimiento, dolor y muerte de muchos hermanos. Nos parece que esta situación pandémica nos ha ido evidenciando el estilo individualista y egoísta de la sociedad en que vivimos».
Fue más allá al precisar que «No se puede pretender y creer ilusamente que las soluciones sólo vendrán de las autoridades competentes o de algún sector de la sociedad. El problema es de todos y, por lo mismo, la solución a este mal que nos aqueja, y todo lo que ha evidenciado, es también de todos».
Para reemprender el camino, afirmó que es preciso cumplir con todas las medidas sanitarias preventivas que se requieren, buscando el cuidado y salud de cada uno.
En el retorno a esta nueva manera de convivir, indicó, sigue vigente la disposición de que todos los fieles, haciendo uso de su libertad de conciencia, quedan dispensados de la participación en la misa dominical y puedan decidir cuándo pueden participar nuevamente de manera pública.
Entre los recursos que, en adelante y por el tiempo que se requieran, serán de uso indispensable para las personas que se congreguen en los templos o espacios pastorales, enlistó a los tapetes sanitizantes, gel antibacterial, termómetro y el cubrebocas.
Mientras que, en los diferentes espacios, las bancas o sillas deberán estar con sus respectivas señalizaciones y dispuestas de tal forma que favorezca la sana distancia entre las personas. EL ORBE / Ildefonso Ochoa Argüello