* Revela el Centro Cardiológico de Tapachula.
Tapachula, Chiapas; 19 de Agosto del 2022.- En los últimos meses se ha incrementado alrededor de un 10 por ciento el número de infartos en los municipios de la frontera sur de Chiapas, reveló Jorge Antonio Vázquez Marroquín, director del Centro Cardiológico de Tapachula.
En entrevista para rotativo EL ORBE, indicó que el mayor número de problemas se están viendo reflejados con cardiopatías isquémicas y que, de manera coincidente, se elevaron paulatinamente a partir de la pandemia del Covid-19, y calcula que un ocho por ciento de la población pudiera estar afectada «es probable que el número sea mayor, pero la población no se atiende o busca medicinas alternativas».
Ante ese panorama consideró que la población en general tiene un pobre apego a los cuidados de salud y, aún cuando las campañas sanitarias de los tres órdenes de Gobierno están presentes, todavía falta mucho por hacer».
Asimismo, que existe un mes para el cáncer de mama, «se celebra, se ponen los moños rosas y hasta las pelotas y los jugadores de los equipos de futbol, que son los que más tenemos en cuenta, de rosa, y sí, es muy importante pero la cardiopatía isquémica mata 10 veces más a las mujeres, y un 12 por ciento más a los hombres por infartos, embolias y derrames», señaló el especialista.
El Coronavirus, precisó, es un padecimiento inflamatorio, sobretodo del aparato pulmonar, pero también sistémico y agudo. Cuando la persona se pone grave se requiere de oxigenación y hospitalización, pero también están los cuadros subagudos, como la hipoxemia o descensos de la concentración de oxígeno en su sangre.
«Eso con frecuencia lo estamos viendo actualmente, personas que estuvieron recluidas en su domicilio un mes o dos, y que tuvieron esos niveles de oxígeno en la sangre. Las consecuencias es que acuden a consulta con fatiga, cansancio, falta de aire, y que no se han recuperado ni siquiera el 90 por ciento de sus capacidades previas al evento, además de que presentan alteraciones del ritmo cardíaco, cómo son extrasístoles», reveló.
De igual forma, «tenemos casos recientes de personas, incluso deportistas de alto rendimiento, con una gran fortaleza física y que acuden porque de repente iniciaron con falta de aire y el familiar se dio cuenta de las palpitaciones rápidas que llegan hasta 140 o 160 por minuto, y resulta que están teniendo un evento de cardiopatía isquémica severo, con angina de pecho e incluso ya había tenido un infarto y está predispuesto a otro». EL ORBE / JC