* Fue Anunciado Como el Proyecto más Grande en la Historia del Soconusco.
Tapachula, Chiapas; 29 de Septiembre del 2022.- El proyecto de la Zona Económica Especial (ZEE), que costó millones de Dólares y varios años de estudios de parte de especialistas internacionales y suponía un cambio en la estrategia de desarrollo regional, fue abandonado y nadie mueve un solo dedo por reactivarlo, aún cuando era el proyecto más grande en la historia de la región Soconusco.
De haberse inaugurado, quedaría atrás el enfoque asistencialista y buscaría de manera directa la atracción de inversión y la generación de empleos. Lo peor es que existe todavía porque nació de un decreto, pero las autoridades prefirieron llevarse ese desarrollo a otro lado.
Así lo consideró el empresario Alfredo Simón Aisa Conesa, quien en entrevista con rotativo EL ORBE, aseguró que la región Soconusco es una zona eminentemente agrícola y el movimiento financiero depende de esa actividad, ya sea con cultivos como el café, banano, soya, mango, cacao, rambután, entre otros, que son altamente codiciados en los mercados nacionales e internacionales y dan vida a la región.
El proyecto de la ZEE se veía importante, creíble, porque a través de ese esquema se consolidaría la actividad del campo, pero al mismo tiempo se atraería inversión para el desarrollo y crecimiento de la producción, vía el establecimiento de industrias así como la búsqueda de mejores canales de comercialización, indicó.
Lamentó que, al cambio de la administración federal, se haya decidido suspender ese proyecto de la iniciativa privada en la que se preveía inversiones en miles de millones de Dólares, «y en lugar de eso, se les ha ido regalando matitas de café o de arbolitos, y con eso creen que ya resolvió el problema del campo, cuando se requieren de grandes estrategias para rescatar a los productores, quienes ahora están totalmente abandonados a su suerte».
Añadió que en la actualidad no existe un programa integral de apoyo a las actividades agrícolas y que por eso cada vez van siendo menos las hectáreas que se dedican al cultivo, incluso de las que se dedican para pastizales y la crianza de ganado, «además, al no contar con estímulos, los campesinos y agricultores que se dedican al campo, también cada día son menos».
Un mes antes del cambio administrativo federal, en el 2018, se informó que ya estaba todo listo para dar los permisos para que las empresas ancla, locales e internacionales, empezaran a construir las fábricas en las diferentes Zonas Económicas Especiales (ZEE) en el país, y que ya se tenían previstas siete firmas con una inversión inicial de alrededor de 2 mil millones de Dólares.
Asimismo, se confirmó que ya había en ese entonces firmadas cartas de intención con 82 empresas por cerca de 7 mil 200 millones de Dólares, de las cuales, 13 eran grandes empresas que intentaban instalarse ase mismo año. EL ORBE / Nelson Bautista