* Cientos de migrantes se concentran en el parque central Miguel Hidalgo en espera de sus trámites ante COMAR.
Tapachula, Chiapas, 9 de diciembre de 2025.—La ciudad vive nuevamente una presión migratoria sin precedentes. Miles de personas, en su mayoría haitianas y cubanas, se han dispersado por calles, plazas y mercados, generando una dinámica social y económica cada vez más compleja. En el centro histórico, comerciantes y empresarios advierten que después de las 18:00 horas la zona se vuelve especialmente tensa, debido a la saturación de espacios públicos y a la percepción de inseguridad que, aseguran, ha aumentado en las últimas semanas.
Esta prolongada espera ha generado un impacto profundo en la vida urbana. Las aceras y parques del centro se han convertido en puntos de estancia temporal, donde familias enteras se resguardan mientras esperan noticias de sus trámites. Para muchos habitantes, esta concentración masiva ha modificado las dinámicas de movilidad, comercio y convivencia cotidiana.
Al mismo tiempo, los grupos de migrantes circulan a diario sin ser detenidos por autoridades del INM o la Guardia Nacional, lo que ha despertado inquietudes entre algunos sectores locales, quienes consideran que la falta de control institucional agrava la situación. Mientras tanto, organizaciones civiles insisten en la necesidad de atender la crisis humanitaria con un enfoque de derechos, recordando que la saturación es consecuencia de la falta de capacidad y recursos del propio Estado.
Tapachula, nuevamente, se encuentra en el epicentro del fenómeno migratorio regional, enfrentando un desafío que afecta no solo a quienes buscan un nuevo hogar, sino también a una ciudad que intenta adaptarse a un flujo humano que no deja de crecer. EL ORBE/ Mesa de Redacción.





