Regresan Ambulantes “Recargados”
Ernesto L. Quinteros
Dos días tardó el gusto de haber liberado dos calles de la 10ª Avenida Norte de comerciantes ambulantes, en el centro de la ciudad.
La limpieza, en su momento fue cacaraqueado por el Ayuntamiento de Tapachula que preside Oscar Gurría; dijeron era la obra del siglo, pero desafortunadamente se filtró la información -desde la misma caja de cristal- que se trataba sólo de un distractor.
Tomando todos esos detalles, no se necesita ser politólogo o experto en el tema para deducir que tarde o temprano los comerciantes informales iban a regresar a las calles que fueron desalojadas hace un par de días.
Dicho desalojo, según información de propios empleados municipales, era para quitar la metralla de críticas, descalificaciones y señalamientos adversos hacia la administración municipal y al propio Edil, ya que su popularidad sigue en caída libre.
Y se comenta desde líneas oficiales del más alto nivel, que la aceptación que tienen los tapachultecos hacia su Gobierno Municipal está prácticamente “en terapia intensiva”.
Así que los súper asesores, tanto de Tapachula como de Tuxtla Gutiérrez, siguen sin encontrar la fórmula de cómo gobernar esta compleja ciudad con más de medio millón de habitantes.
Desgraciadamente con lo sucedido, los asesores, lejos de quitarle problemas al edil Oscar Gurría le están generando más, y entre más días y semanas transcurren, las problemáticas en la geografía local siguen creciendo.
Pues a la fecha no hay Plan de Gobierno Municipal, la gente se sigue quejando de la inseguridad, la falta de obras sociales, falta de un sistema de recolección de basura, que no existe un proyecto que, de vida y utilidad a diferentes edificios y espacios públicos, la pésima imagen urbana entre otra gran cantidad de servicios municipales que son ineficientes, que no nos alcanzaría este espacio para mencionarlos.
Y a todo eso súmele, que gracias a esa gran idea de la “caja china”, hoy a Oscar Gurría le revive con mayor fuerza el problema del ambulantaje, porque ahora que regresaron a la 10ª, parece que se reprodujeron, ahora son más. Así que lejos de quitarle los reflectores al Edil, le pusieron más.
Como lo hemos comentado en este espacio, el problema del ambulantaje es muy complejo, es el reflejo de la falta de empleo y de oportunidades de trabajo para miles de familias.
El tema lo tienen que tratar con mucha seriedad, y tienen, sobre todo, dejarlo de ver como un negocio ilícito en donde siguen timando y explotando a familias de escasos recursos, que en su desesperación por hacerse de un espacio en donde vender en la vía pública, en la zona centro de la ciudad, aceptan el chantaje, la amenaza y pagan cuotas diarias y semanales a supuestos inspectores de servicios públicos.
La Red de Complicidades.
En el tema del ambulantaje hay toda una red de complicidades, de corrupción, abuso de autoridad y chantaje. Pero sobre todo este tema es un “negocio millonario” para unos cuantos en el Gobierno Municipal.
Cuando estuvo el nefasto exalcalde de Tapachula, Neftalí Del Toro sucedía lo mismo, y fue en este trienio en que proliferó y creció de manera desproporcionada el ambulantaje.
Fue tanto el descaro de la administración pasada, que, si no vendieron la plaza interna del Palacio Municipal, es porque ya iba a ser demasiada la avaricia, porque de ahí invadieron todas las calles del centro con el comercio ambulante.
Lo curioso es que los hoy funcionarios actuales de la Secretaría de Servicios Públicos Municipal, como de la Tesorería Municipal, aseguran que no existe un padrón de cuántos ambulantes hay, y que no tienen datos de recaudación. ¿Será?
Gurría la Hace de Tapadera.
Mientras todo esto sucede, militantes del Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA en Tapachula, califican al alcalde Oscar Gurría de ser la tapadera del nefasto exalcalde priista Neftalí Del Toro, porque desde que inició su administración no quiso informar como recibió y en qué condiciones recibió la administración municipal, y hoy ya se le hizo noche para dar esa información.
El sospechismo de que hubo un acuerdo, de millones de razones, un PRIMOR entre Gurría y Del Toro crece entre la auténtica militancia morenista, quienes ve con decepción y tristeza que no existirá un cambio en Tapachula.
En retrospectiva, si el actual Edil hubiera informado con objetividad, de las condiciones de cómo le entregaron la administración municipal, se hubiera ahorrado un sinfín de problemas y sobre todo culpas, que hoy tendrá que seguir cargando, aunque ya no le esté gustando la idea.
La pregunta es ¿le alcanzarán esas millonarias razones que tiene Gurría, para seguir de tapadera y salir bien librado en esta administración municipal?
Por hoy ahí la dejamos, nos leemos mañana. ¡Ánimo!
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