“Efecto Cucaracha” por Combate a las Maras
Ernesto L. Quinteros
Uno de los conceptos más sonados en materia de seguridad pública es el llamado “efecto cucaracha” en esta región de la frontera sur de México.
Sobre todo ahora que se han endurecido las leyes y el combate a las pandillas transnacionales conocidas como Maras, en la República de El Salvador, en donde las autoridades de ese país han detenido a miles de criminales en esta nación centroamericana.
La lógica indica que debido a esa situación, los pandilleros buscarán refugio en otras naciones centroamericanas, pero lo más probable es que intenten llegar a territorio mexicano para posteriormente ir en busca del sueño americano.
Como lo hemos comentado hasta el cansancio en este rotativo, desde que se empezaron a ver las primeras caravanas de migrantes en Octubre del 2018, hay una gran preocupación de la población, y no se trata de ser despectivo, ni estigmatizar la migración, el problema es que en esos inmensos éxodos de miles de familias de distintos países también “vienen criminales”.
Las pandillas maras en la actualidad están siendo golpeadas con toda la fuerza del estado salvadoreño, generando ese efecto “cucaracha”, que ya se empieza percibir en esta zona fronteriza.
Lo comentamos porque el pasado jueves fue detenido en Tapachula un presunto pandillero de origen salvadoreño, con varias bolsitas con características propias de la cocaína, por lo que fue puesto a disposición de la Fiscalía de Atención a Migrantes que determinará su situación jurídica.
Sobre esta captura se supo que mediante un operativo antipandillas en la que participan distintas corporaciones policíacas, en la 5ª Calle Poniente y malecón del río Coatán, en la colonia Obrera, en Tapachula, fue interceptado el sujeto que responde al nombre de José Romeo “N” de 24 años de edad, originario del mismo país.
El detenido presenta una serie de tatuajes en su anatomía que lo vinculan a las pandillas maras. Por lo que las autoridades ya realizan las investigaciones.
Sin duda, esto es una prueba de que dichos pandilleros centroamericanos ya empiezan a tener presencia en esta zona.
Y precisamente por esa situación, las corporaciones policiacas ya realizan algunos operativos de seguridad.
Sin embargo lo importante será mantener esas acciones de combate a la delincuencia de manera permanente, en donde participen todas las corporaciones.
Lamentablemente nos guste o no reconocerlo, todo lo que pasa en Centroamérica termina por repercutir también en esta región fronteriza, en donde sigue llegando la oleada de migrantes de distintas nacionalidades, aprovechando los cientos de pasos de extravío que hay en la línea divisoria entre México y Guatemala.
En pocas palabras nuestras autoridades en todos sus niveles tienen que estar preparadas para recibir a la banda. La pregunta es ¿Cómo la van a recibir?
Imitadores de Maras.
Las pandillas maras siempre han tenido presencia en esta región, lo que también ha generado que jóvenes originarios de esta zona fronteriza “los imiten”.
Es decir, la sociedad también debe de estar atenta y preparada para orientar a las nuevas generaciones, en particular a los adolescentes. Para que este tema de pandillas no se vuelva una moda.
Los delincuentes siempre buscarán reclutar nuevos miembros y seguidores, aprovechando la desintegración familiar y otros fenómenos sociales.
Y este tema no nos debe de espantar, más bien, debemos de ser más responsables y dar mayor atención a nuestros jóvenes.
Por hoy ahí la dejamos, nos leemos mañana.
¡Ánimo!
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