*A Causa de la Pandemia.
Tapachula, Chiapas; 01 de Octubre del 2020.- Los estragos ocasionados por la pandemia del Covid-19 no solamente han sido en la salud, sino también en lo económico. Los daños colaterales apenas se empiezan a resentir, como en la disminución de un 30 por ciento en la matrícula estudiantil en escuelas superiores en la región Soconusco.
Jesús Fermín Cáceres Farrera, Rector del Instituto Universitario de México, con sede en Tapachula, dijo en entrevista para EL ORBE, que todos los sectores han sido afectados por esas causas, unos en mayor medida que otros.
«Nuestra matrícula no es la que hubiéramos esperado en otros tiempos y circunstancias, pero vamos bastante bien. La verdad es que ha habido una gran respuesta a pesar de estas situaciones», afirmó.
Al hacer un balance aproximado al panorama de lo que está ocurriendo en las instituciones de educación superior en la región, calculó que la matrícula se redujo en un 30 por ciento, en términos de metas.
Ante la posibilidad del regreso a clases presenciales, opinó que se trata de reactivarse en la vida cotidiana, como lo han hecho otros sectores, guardando las medidas sanitarias.
«Finalmente las aulas sin nuestros estudiantes, simple y sencillamente no tienen una razón de ser. Pero el objetivo sustancial de su formación profesional no se ha detenido», abundó.
Uno de los desafíos que ha dejado la pandemia hasta ahora, según consideró, ha sido la adaptación.
«En todos los sectores de la sociedad observamos que siempre hay cierta resistencia a adaptarnos a una nueva circunstancia y en ese aspecto, la comunidad universitaria se ha portado a la altura, han sido jóvenes muy comprometidos que entendieron que lo importante en este momento es resguardar la salud», comentó.
Es un reto histórico para las instituciones el hecho de adaptarse con nuevas tecnologías, incorporarlas a los procesos de formación profesional para que los estudiantes puedan continuar en esa preparación, sostuvo.
Dentro de los protocolos a los que se han comprometido para las clases las clases presenciales, dijo que incluyen el distanciamiento dentro del aula, con al menos una distancia de un metro, el uso de gel antibacterial, cubrebocas, tomar la temperatura a cada uno de los estudiantes que ingresan, entre otros.
Hasta ahora, dijo, no hay indicaciones oficiales en torno a las fechas de retorno a la educación presencial. EL ORBE / M. Cancino