*Sólo Unos Cuantos se Niegan a Desaparecer.
Tapachula, Chiapas; 21 de Marzo del 2023.- La posibilidad de tener cámaras de alta resolución para tomar cientos de fotos y videos, editarlos y enviarlos de inmediato a cualquier parte del mundo de manera gratuita, ha sido uno de los factores par el desplome de la profesión de fotógrafos en los últimos tres años, hasta en un 70 por ciento.
Gabino Ventura González, dedicado a esas actividades desde hace 58 años en el centro de la localidad, dio a conocer en entrevista para rotativo EL ORBE, «ya no es como antes, cuando habían trabajitos. Salía uno adelante ahora ya no, porque llegaron los celulares y ya bajó mucho, solamente a veces en bodas, 15 años, pero aquí una vez al mes, a los dos meses, a los tres meses».
Recordó que el material más comercializado era la fotografía postal -conocida también como 4-R- y que, en su caso, llegó a tomar hasta 150 en un solo día, además de las instantáneas, las infantiles, y las turísticas. «Todas esas ya se acabaron. A la semana ya no tomo ninguna, y al mes creo que una sola».
Al hacer un balance de esa situación y de los cambios en el consumo de la población, insistió que la llegada del teléfono móvil cambió todo, «porque cuando muy salió, bajó todo. Yo tomaba 150 fotografías y se redujo a 100; después a 80, luego a 50, hasta que se desplomó».
Del número total de personas que se dedicaban a esas actividades hace tres años, a la fecha -indicó- se ha reducido al menos un 50 por ciento.
Ahora los consumidores buscan las fotografías infantiles o las que se requieren para la solicitud de empleo, diplomas, inscripciones escolares, cartillas militares, pasaportes y otros procesos administrativos, «incluso antes me llegaban a buscar para pedirme fotografías en determinados lugares, un cumpleaños, unos 15 años, ahora ya no».
Por eso estimó que son los meses de inscripciones escolares y la temporada de graduaciones cuando más actividades tienen durante el año, pero nada más.
Consideró que, por esos mismos requerimientos de la vida cotidiana, ese tipo de trabajos va a sobrevivir, pero con una inercia de cada vez menos. EL ORBE / JC