*Revela Estudio de Empresa Consultora.
Ciudad de México; 25 de Marzo.- La consultora Integralia publicó un informe tras el paso del huracán Otis, el cual destacó que la devastación económica se calcula en 15 mil millones de Dólares, los daños asegurados alcanzan el 12%, «la interrupción de las cadenas de suministro ha constituido uno de los impactos más significativos del paso de Otis».
Integralia recalcó que los sectores como los materiales de construcción y la banca electrónica son los más afectados «este desafío no solo tiene impacto sobre la disponibilidad inmediata de bienes y servicios esenciales, sino que también complica los esfuerzos de reconstrucción y la recuperación económica a largo plazo».
Integralia recopiló que la eficacia gubernamental presentó áreas críticas que requieren mejoras, en especial, en la efectividad de la asignación de los apoyos, ya que la implementación de programas de asistencia tuvo efectos mixtos, por un lado benefició la economía de la población y, por el otro, desincentivando la búsqueda de empleo.
Además, en la aceptación del presidente, Andrés Manuel López Obrador y la gobernadora de Guerrero, Evelyn Salgado «tuvieron una abrupta caída de 15 puntos porcentuales, el nivel de aceptación estas dos figuras han ido mejorando ligeramente con el paso de los meses, en consonancia con el avance en el reparto de apoyos sociales».
A pesar del aumento en la ayuda y la presencia de la seguridad, persisten problemas en la reconstrucción y la prestación de servicios.
El resultado de dicho análisis resaltó la necesidad de una mejor planificación y respuesta ante dicho desastre natural «las medidas emprendidas no han sido las suficientes para reactivar una ciudad turística, donde las brechas de desigualdad social se han ampliado, y solo entre 10% y 15% de los negocios lograrán abrir a principios de 2024, mientras otros cerrarán definitivamente por falta de apoyos para su recuperación», dijo Integralia.
Cabe señalar que Integralia emitió una serie de recomendaciones para la construcción de Acapulco más justo, equitativo, seguro, moderno y sustentable». Las sugerencias que emitieron son: Implementar estrategias de seguridad ciudadana con una visión a largo plazo, que puedan sostenerse más allá de la presencia de la Guardia Nacional, la participación ciudadana en la prevención del delito que podría potenciarse para lograr una seguridad sostenible.
La segunda es enfatizar la creación permanente de habilidades prácticas que respondan a las necesidades del mercado laboral local. Ante el fin de la ayuda extraordinaria, la educación y la capacitación para el trabajo se presenta como un eje crucial para asegurar el futuro de Acapulco.
El tercer punto es desarrollar un plan amplio de reconstrucción, que trascienda los límites temporales de la actual administración. Este plan deberá contemplar acciones específicas para mitigar y reducir el riesgo de desastres futuros, integrando soluciones basadas en la naturaleza y tecnologías sostenibles.
Asimismo, debe construirse nuevas infraestructuras con estándares de resiliencia ante desastres naturales para minimizar el impacto de futuros eventos adversos. Esto incluye no solo la infraestructura física de los negocios, sino también la infraestructura crítica que los soporta, como redes eléctricas, sistemas de agua y saneamiento, y vías de acceso.
De igual forma, trabajar en crear instituciones locales sólidas, que promuevan la resiliencia comunitaria y las fuentes alternativas de financiamiento para aquellos pobladores y empresarios que aún se encuentran en situaciones vulnerables.
Otras temáticas que también analizaron son: eficacia gubernamental, consecuencias políticas, impacto social, rezago social, dinámica criminal entre otras. Sun