Hace dos años, miles de africanos deambularon por Tapachula.
* Conformada por Cubanos, Haitianos y Africanos.
Tapachula, Chiapas; 15 de Febrero.- En las últimas horas fue detectado, en la frontera entre Colombia y Panamá, un grupo considerable de migrantes de diversas nacionalidades que están conformando una nueva caravana que tendría como destino llegar a Chiapas y buscar quedarse a vivir en territorio mexicano.
La particularidad de este nuevo éxodo de personas es que, casi en su totalidad, son de raza afro, de países como Cuba, Haití y África.
Organismos locales de derechos humanos señalaron estos se están agrupando en las comunidades de Puerto Obaldía, Armila y Anachucuna, en la provincia de Darién.
De acuerdo al último balance de la situación, ya habían alrededor de mil extranjeros divididos en esas tres comunidades, en espera de que el número fuera mayor para formar una sola caravana.
En global, hay adultos y jóvenes de ambos sexos, pero también personas de la tercera edad, niños y mujeres embarazadas, cuyos hijos podrían nacer en cualquier momento y lugar en tránsito.
Ante esa situación, el Gobierno de Panamá envió a esa región poco más de cinco toneladas de ayuda humanitaria, entre comida, agua, medicamentos y enseres de limpieza.
Mientras, elementos de la Fuerza de Tarea Conjunta pusieron en marcha la Operación Flujo Controlado, en el que se incluye un cerco epidemiológico y la aplicación de la Ley Migratoria; es decir, quienes no acrediten su legal estancia tendrán que salir del país de manera voluntaria o ser deportados.
En torno al tema, el Ministerio de Seguridad Pública de Panamá adelantó que al inicio de la próxima semana sostendrán una reunión con las autoridades de Costa Rica para analizar el flujo de migrantes.
Cabe recordar que hace un par de años, Costa Rica y Panamá vivieron una crisis similar, cuando miles de migrantes cubanos quedaron varados en su intención de llegar a México y después a los Estados Unidos, luego de que Nicaragua les cerró el paso por su territorio.
En aquella ocasión, grupos afro similares llegaron a Chiapas de manera ilegal, se entregaron a las autoridades migratorias para obtener un salvoconducto que les permitiera recorrer el territorio mexicano sin ser detenidos y esperar en la frontera con los Estados Unidos un documento que les permitiera ingresar a esa nación de manera legal.
Sin embargo, las leyes migratorias de los Estados Unidos fueron modificadas para eliminar el programa de asilo denominado “Pies secos, pies mojados”, de tal manera que esa opción es casi imposible.
Algunos migrantes de este nuevo grupo han dicho a la prensa local que tienen la intención de quedarse a vivir en Chiapas o en cualquier otro Estado de la República Mexicana, para aprovechar el programa de la Tarjeta de Visitante por Razones Humanitarias (TVRH) impulsado por el Gobierno Federal.
Se estima que infinidad de personas de esas nacionalidades estarían cruzando una región selvática ubicado en la franja limítrofe entre esos dos países, para incorporarse a la caravana.
El ministro de Seguridad panameño, Jonathan del Rosario, informó a los medios de comunicación que ese grupo de migrantes está entrando a su nación de manera abrupta.
«Son unos irrespetuosos que llegan a nuestro territorio filmando, gritando, ofendiendo a las autoridades. Nuestra labor es mantener el orden en el país. Quienes no se sometan a las autoridades tendrán que enfrentar las consecuencias», afirmó.
Desde ese punto hasta Chiapas, hay una distancia aproximada a unos mil kilómetros. EL ORBE/Ildefonso Ochoa Argüello
