“Exalcaldes de Chiapas, demandados por presunta corrupción no han sido sentados en el banquillo de los acusados”. (Pueblo bueno y sabio)
La Prueba de Fuego
Oscar D. Ballinas Lezama
Los expertos en salud aseguran que en el país azteca, se espera que en Enero del año venidero inicie la cuarta ola de contagios por Covid; luego de que el Gobierno Federal diera luz verde a la ciudadanía para que acudan a eventos multitudinarios en donde no se guarda la sana distancia y el uso del cubrebocas se está convirtiendo en un mito.
Para nadie es secreto que la invitación del ‘Gran Tlatoani’ a que la gente saliera a las calles a presenciar el pasado desfile del 20 de Noviembre, sin olvidar acudir el primero de Diciembre al zócalo de la Ciudad de México donde rindió su Tercer Informe de Gobierno, sin importar que ponen en peligro a la ciudadanía que puede contagiarse con la peste del siglo XXI.
Otras naciones del mundo están tomando medidas para defenderse de los nuevos ataques del Covid, quien según los especialistas en salud, el virus sigue mutando y convirtiéndose cada día en un serio y delicado peligro para la humanidad.
El Gobierno mexicano ha venido aplicando desde hace más de un año una serie de vacunas que ha comprado, prestado o le han regalado los países de primer mundo como Estados Unidos de Norteamérica y Rusia.
Lo preocupante del caso es que, la misma Organización Mundial de la Salud ha sido clara en explicar los motivos por los que no ha autorizado las vacunas CanSino y la Sputnik, sin embargo, al Gobierno mexicano esta advertencia le ha valido ‘una pura y dos con sal’ o les ha hecho lo que el viento a Juárez, al aplicarlas a millones de mexicanos sabiendo que el uso de este antivirus podría causar un impacto mortal.
En otras cosas, los Alcaldes y Alcaldesas recién electos por los próximos tres años, en su mayoría no han llevado a cabo el protocolo de entrega-recepción, aceptando estar en silencio a sabiendas que sus antecesores se llevaron hasta las cucarachas y lo que diga o haga el ASE, que comanda el auditor superior José Uriel Estrada Martínez, los tiene sin cuidado.
Hasta ahora, los Presidentes Municipales que ocupan los lugares de quienes les antecedieron parecen ‘chivos en cristalería’, afirmando que los que se fueron ‘barrieron con todo’ y les dejaron únicamente deudas millonarias y obras inconclusas que fueron pagadas por adelantado, quizás por aquello de no perder el ‘santo diezmo’. Fueron pagadas sin estar concluidas.
Para nadie es secreto que varios de ellos fueron denunciadas por los integrantes de su Cabildo, un botón de muestra serían las ediles de Huehuetán y Tuxtla Chico, así como el de Escuintla, sin embargo, nada se sabe del actuar de la Auditoría Superior del Estado de Chiapas, contra la presunta corrupción e impunidad de quienes han sido acusados como malos ‘servidores del pueblo’.
La justicia sigue brillando por su ausencia en estos tres años del sexenio de la cuarta transformación, al igual que se hacía con el gobiernos neoliberales del PRI y el PAN; la ley se sigue aplicando únicamente en los bueyes de la carreta de mi compadre, el sol no se puede tapar con un dedo aunque se diga que tienen otros datos.
Alcaldes y Alcaldesas actuales en Chiapas creen tener agarrado de la cola al tigre y dándose cuenta que sus antecesores no recibieron ningún castigo por sus presuntos actos de corrupción y nepotismo, llevan más de dos meses ‘nadando de a muertito’ y haciendo obritas de relumbrón para darle atole con el dedo a sus conciudadanos.
Pocos son los que pareciera que tienen conciencia de su actuar y servir sin beneficiarse en forma personal, saben que los primeros cien días serán su prueba de fuego en las administraciones que representan, hasta ahora, la mayoría ha demostrado ser la misma gata, un poco revolcada pero con las mismas mañas de sus antecesores, que se convirtieron de la noche a la mañana en los nuevos ricos del pueblo.
Los chiapanecos, en especial los soconusquenses, ya están hartos de politiqueros sinvergüenzas, de los que en campaña les bajan la luna y las estrellas, pero cuando llegan al poder se transforman en soberbios, inútiles y corruptos, con algunas raras excepciones que se cuentan con los dedos de las manos.
La segunda quincena de Enero del 2022 será clave para los municipios chiapanecos, los Alcaldes y Alcaldesas en turno habrán de informar sobre la cantidad de obras y recursos que invirtieron (aquellos que hicieron algunas obritas con el apoyo del Gobierno Estatal).
Cuentas claras espera el pueblo bueno y sabio de Chiapas, con pelos y señas de cada Peso invertido, manifestando los administradores de los dineros de cada municipio, las licitaciones hechas para las obras y quiénes fueron los ‘afortunados ganadores’, así como los motivos que tuvieron para realizar tal o cual obra en la que se supone tiene que haber petición por escrito firmado de los comités seccionales o de colonias.
Los cien días de Gobierno no deben dejarse pasar en forma desapercibida, los Gobiernos Federal y Estatal deberán estar con un ojo al gato y otro al garabato para que no suceda lo que ya sucedió en los tres primeros años con exgobernantes municipales que se fueron como el ‘jibarito, locos de contentos con su cargamento’ sin que pase absolutamente nada, y cuando ha pasado, tampoco pasa nada.
