* Delegación de Obras y Caminos Canceló su Rehabilitación.
* LA FALTA DE MANTENIMIENTO, AUNADO AL DAÑO QUE CAUSAN LOS SISMOS Y LA HUMEDAD, HAN CONVERTIDO AL EDIFICIO EN UN PELIGRO PARA QUIENES TIENEN QUE ACUDIR A PAGAR IMPUESTOS O HACER TRAMITES.
Tapachula, Chiapas; 2 de Julio.- La obra que pomposamente se había anunciado para la rehabilitación de lo que aún queda del edificio de la Unidad Administrativa de Gobierno, al sur de la ciudad, ha sido cancelada porque los recursos no fueron canalizados.
De los ocho millones de Pesos que los funcionarios aseguraron que se destinaría a esos trabajos, luego se convirtieron en seis, después en cinco y, ahora, no sabe hasta en cuánto lo redujeron o hacia dónde desviaron ese dinero.
Los actos vandálicos cometidos por un grupo de jóvenes, plenamente identificados, agudizaron aún más la situación, porque destrozaron vidrios, ventanales, muebles y hasta derribaron la puerta principal, que quién sabe si algún día la compondrán.
Las últimas obras de mantenimiento estaban a cargo de la Delegación de Obras Públicas y Caminos del Gobierno del Estado, pero se suspendieron.
Algunos trabajos se hicieron, como el quitar varias capas de impermeabilización que se colocaron en la azotea durante los sexenios estatales pasados, además de que parcharon algunas grietas.
Se repararon dos baños, de los cuales uno quedó con serios daños a consecuencia del reciente sismo de 7 grados. Sin embargo, la falta de aseo y problemas en las redes de agua potable y drenajes, orilla, a los que entran ahí, a que lo hagan por su propia cuenta y riesgo.
La “gran ingeniería” empleada para reparar el domo central, fue haber colocado una estructura con láminas que oscurecieron el edificio, porque ni lo focos ni el alumbrado público exterior funcionan.
Protección Civil y la Carabina de Ambrosio.
Con sus casi 27 años de servicio y -al menos- dos dictámenes de Protección Civil de que es un lugar de alta riesgo y por lo tanto debe ser demolido, ese se está cayendo por pedazos.
Las instalaciones, construidas en 1991 por la empresa Herma, cobija todavía muy pesar de los recortes de personal, a más de un centenar de trabajadores estatales, que exponen todos los días su vida por las lamentables condiciones en las que se encuentran esas oficinas.
Y es que durante muchos años ese lugar no recibió el mantenimiento y la rehabilitación que requería y, por lo mismo, se fue deteriorando gradualmente.
Además, los sismos le han afectado severamente, sobre todo en paredes, escaleras y falso plafón, que junto con la humedad, han ocasionado que se cerraran ya varias áreas.
Ahí se alberga a las Delegaciones de Hacienda; Registro Público de la Propiedad; dos Oficialías del Registro Civil, Conciliación y Arbitraje, la Secretaría del Trabajo, Obras Públicas y Comunicaciones, Catastro, Atención Ciudadana, Subsecretaría de Gobierno, Contraloría Social, Sedem, Educación Estatal, Comunicación Social, y Recursos Naturales.
Todos los días, durante años, ese lugar ha generado millones de Pesos a las autoridades por el pago de impuestos, derechos y otras contribuciones fiscales.
Pero el simple hecho de entrar a ese lugar representa una vergüenza del Gobierno, no sólo porque el olor a heces fecales y el agua de lluvia invade todo, sino porque es una oficina que refleja solamente la miseria y marginación al Soconusco.
Sin embargo y para sorpresa de todos, el 15 de Agosto del año pasado, hace ya casi un año, se dio a conocer que se había aprobado una rehabilitación.
Hasta el momento se desconocen los motivos que hay para que Protección Civil, en cualquiera de sus instancias, guarde sumisa en el silencio y no proceda a que se cumplan los dictámenes. Si no cumple con esa prioritaria obligación, entonces, ¿para qué se les paga?
Siendo un edificio que genera grandes ingresos, debería estar en buenas condiciones.
La Unidad Administrativa sirve de sede también para el pago de los apoyos gubernamentales a las personas de la tercera edad, las madres solteras, entre otros.
En ésta supuesta “rehabilitación” también había el compromiso de llevar a cabo una serie de trabajos en los jardines y áreas verdes que comparte esas oficinas con las del Supremo Tribunal de Justicia del Estado, como el alumbrado público y el mantenimiento de las áreas verdes.
En lugar de eso, es un área selvática y completamente oscura por las noches, sin contar que en lugar de verdes pastizales, fueron colocados puestos de vendimia. EL ORBE / Ildefonso Ochoa Argüello