*Frontera Hidalgo
*Se Desconocen las Causas de su Decisión
*Marino López Aguilar de 23 Años, Vivía Solo y Desde el Domingo no Sabían de él
Frontera Hidalgo, Chiapas; 4 de agosto.- Lugareños del ejido “Ignacio Zaragoza”, solicitaron el auxilio al servicio de emergencias, indicando que de un domicilio salía un olor fétido a putrefacción y que las moscas revoloteaban por el techo de lámina, señalaron que no podían ingresar ya que la casa estaba cerrada por dentro.
Al activarse la alerta para las diferentes corporaciones policiacas estatales y municipales, los uniformados se trasladaron a la calle ubicada a una cuadra de la parada “El Trompillo” de dicho ejido y verificaron que del inmueble salía el olor a putrefacción, motivo por el cual acordonaron el área y solicitaron la intervención del personal de servicios periciales.
Hasta el lugar se presentó un señor de la tercera edad y dio a conocer que en dicho domicilio vive su hijo y que el domingo por la mañana fue la última ocasión que lo vio. Al abrir la puerta, tuvieron a la vista el cuerpo sin vida de una persona del sexo masculino colgado por el cuello con un lazo, se encontraba en un avanzado estado de putrefacción y el cuerpo lleno de ámpulas por el calor que sufrió.
Señaló el angustiado padre, que su hijo en vida respondió al nombre Marino López Aguilar, tenía 23 años de edad y de nacionalidad mexicana. Indica que desconoce las causas que orillaron a su vástago a matarse, ya que no dejó carta póstuma.
Una vez que se dieron por terminadas las primeras diligencias, el cadáver fue trasladado a Tapachula al Servicio Médico Forense, para que le fuera practicada la necropsia de ley. Más tarde se presentó ante el Ministerio Público el papá de Marino López Aguilar, para identificar el cuerpo y solicitar que se lo entregaran para darle cristiana sepultura. EL ORBE / Álvaro Islas Hernández
