Por Ernesto L. Quinteros
Gurría no Atiende ni a los de Casa
Es irónico, pero quien mal gobierna el municipio de Tapachula es Doctor de profesión, pero no da las garantías para que los trabajadores del Ayuntamiento reciban un servicio de salud de calidad, o por lo menos con lo mínimo indispensable para que sean atendidos.
Y si no atiende a los de casa, menos atenderá a los de fuera (pueblo), en donde la situación está prácticamente fuera de control.
El pasado martes empleados sindicalizados del Ayuntamiento cansados de promesas, y hartos de seguir soportando malos tratos de los funcionarios moresnitas de primer nivel, salieron a protestar con pancartas en las afueras de la Presidencia Municipal.
Por increíble que parezca, el aun Edil Oscar Gurría Penagos no escucha a nadie, más que a su conyugue, ella si lo trae marcando el paso.
Desgraciadamente, su falta de capacidad en el ejercicio público, está dando como resultado a un Tapachula rezagado y abandonado, en donde siguen las denuncias de corrupción, abuso de autoridad y falta de transparencia en el ejercicio de recursos públicos.
Posterior a esta protesta los funcionarios de primer nivel, incluyendo al Edil, se comprometieron con los empleados a garantizar el servicio de salud a los trabajadores de la comuna.
Según algunos testimonios de los propios empleados, en el presente año les han venido recortando los recursos en el área de salud.
Así como el Gobierno Municipal presuntamente tiene una “deuda millonaria” con diferentes proveedores, como farmacias, sanatorios y especialistas, quienes al ver la negativa de pago decidieron cancelarle el servicio al ayuntamiento.
También hay denuncias de que existen demasiados compromisos económicos que el edil no ha querido resolver, o más bien no ha podido resolver.
Ya que cuando inició la administración hicieron convenios de trabajo con diferentes proveedores del área médica, a quienes desde hace ya varios meses no les pagan.
Aunado a que la administración municipal pasada que encabezó el nefasto ex alcalde priísta Neftalí Del Toro también les dejó diversos compromisos económicos por cumplir.
Dato curioso, porque de eso el actual edil morenista se ha negado por todos los medios a informar, de cómo recibió la administración y en qué condiciones se dio el proceso de entrega recepción.
Algunos de los inconformes confiaron a este servidor que, derivado de todas esas situaciones, es que hoy en día los trabajadores municipales no tienen un buen servicio médico, “por la falta de recursos económicos en el gobierno local”.
Y a como van las cosas no se necesita ser especialista en finanzas para deducir que la falta de liquidez del Ayuntamiento, es derivado del mal manejo en los recursos públicos.
En este rotativo le hemos informado cómo el gobierno local se ha negado a transparentar el ejercicio de los recursos públicos, ha evadido la responsabilidad de informar, a pesar de que por ley está obligado.
No se sabe nada de la licitación de millonarios contratos en diferentes áreas, incluyendo la de salud.
Para mala fortuna del Edil Gurría y sus colaboradores, muchos contratos se han filtrado a los medios de comunicación, evidenciando que existe corrupción y tráfico de influencias en muchos de ellos.
Y ante la falta de liquidez del Ayuntamiento, también ya se empieza a sospechar que una buena parte de los recursos públicos están siendo malversados, sólo por cumplir caprichos del Edil y sus allegados, quienes presuntamente han triangulado contratos con diferentes empresas que son propiedad supuestamente de familiares e incondicionales que dan servicios al gobierno local morenista.
Un ejemplo de cómo se ha hecho un mal uso de los recursos públicos, es el contrato millonario de la renta de 30 camiones recolectores de basura, que le dieron a una empresa de Querétaro, a la que se le han pagado sumas millonarias en dos meses.
Sólo falta que el Edil y compañía salga con la puntada que no hay dinero para comprar medicamentos, y para cubrir los gastos en materia de salud para los empleados municipales, porque todo se lo están gastando en esa renta de camiones, que no ha servido de nada para resolver el problema de la recolección de desechos en la ciudad.
De ser así estaríamos hablando que a los empleados municipales les cambiaron el servicio de salud, por la renta de camiones recolectores de basura. ¿Alguien dijo que quería un cambio?
Así que sólo es cuestión de tiempo para que en el área de salud también reviente los escándalos de corrupción y malversación de fondos. Sólo es cuestión de tiempo.
Por hoy ahí la dejamos, nos leemos mañana. ¡Animooo!
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