* Con Epicentro a 17 km de Huixtla.
Tapachula, Chiapas; 10 de Febrero.- Un sismo que alcanzó los 5,1 grados de intensidad en la Escala de Richter, sacudió a la Costa-Soconusco, Sierra, Istmo y Centro de Chiapas, en la madrugada de éste sábado.
Por lo mismo, fueron movilizados elementos de las unidades locales de Protección Civil y de cuerpos de rescate, y aún cuando fueron atendidos varios casos de histeria, no se registraron decesos ni daños materiales de consideración.
De acuerdo al Servicio Sismológico Nacional (SSN), el temblor ocurrió apenas pasada las cinco de la mañana, y tuvo epicentro a 17 kilómetros al suroeste del municipio de Huixtla, cerca de Tapachula.
A lo largo del litoral del Pacífico chiapaneco, hubieron otros seis movimientos telúricos que fueron de los 3.7 a los 4.2 grados.
En el transcurso del día también fueron verificados edificios públicos y lugares de concentración masiva, pero tampoco hubo novedades.
En los primeros 40 días que van del año, Chiapas ha sido escenario de 470 temblores, lo que representa un 87 por ciento más que el mismo periodo, pero del año pasado, cuando se habían contabilizado 252.
Al menos la mitad de los sismos ocurridos este sábado activaron las alertas sísmicas colocadas en diversas regiones del Estado, como el caso de Tuxtla Gutiérrez, que tiene en edificios públicos, calles y en la periferia de algunas escuelas.
En Tapachula, el 25 de Octubre del año pasado las autoridades locales instalaron el primer sistema de alerta que, aseguraron, costó 2.5 millones de Pesos.
El sistema emite una alerta intermitente con alcance de hasta un kilómetro y medio a la redonda, cuando detecta ondas cercanas producidas por un movimiento telúrico.
A pesar de los casi 500 sismos que van en este 2018, habitantes del centro de la ciudad señalaron que hasta ahora escucharon funcionar la alerta.
Sin embargo, durante el resto del día fue tema de polémica, porque algunos opinaron que la alerta se encendió cuando ya estaba ocurriendo el temblor y no antes, y que después, los intensos sonidos de los parlantes continuaron durante mucho tiempo, sin que nadie pudiera apagarlos.
Por lo mismo se espera que se investigue si esos instrumentos están funcionando correctamente o, de lo contrario, obligar al proveedor que haga las correcciones que sean necesarias. EL ORBE / Ildefonso Ochoa Argüello
