*En Cacahoatán.
Tapachula, Chiapas; 04 de Enero del 2021.- El Ayuntamiento fronterizo de Cacahoatán que aún encabeza el alcalde, Julio Calderón Sen, se ha convertido -a opinión de los pobladores-, en el peor en la historia de ese municipio.
Para muestra, habitantes del ejido Unión Roja, están que trinan en contra de las autoridades municipales, ya que los tienen completamente olvidados en cuanto a la rehabilitación de las calles.
Reina López Díaz, en voz de los afectados, dijo en entrevista para EL ORBE que ya tiene mucho tiempo que han venido solicitando el arreglo de esas vías de comunicación, pero jamás les hacen caso, no obstante ser un peligro, sobre todo para las personas de la tercera edad.
Hay constantes encharcamiento y eso provoca que se formen lodazales, los mimos que causan problemas, ya que por ahí transitan adultos mayores y niños quienes han caído y resultaron lastimados, explicó.
Agregó que el actual Presidente Municipal cuando anduvo en campaña enarbolando las siglas del Partido Revolucionario Institucional (PRI), visitó la mayoría de los ejidos, pero una vez que ganó la alcaldía, se olvidó por completo de cumplir la infinidad de promesas que hizo con los campesinos para obtener el voto.
Por su parte, Adriel Gamboa Vázquez, otro de los afectados, dijo que el destrozo de las calles lo han expuesto ante las autoridades municipales, pero que nadie responde y el problema sigue.
Añadió que cerca de esas calles está el telebachillerato y la telesecundaria, además de que por ese rumbo transitan quienes tienen parcelas y utilizan esos caminos para pasar con sus cosechas de café o de otros productos, y por eso exigió a ese Ayuntamiento a que arregle las arterias destrozadas.
Los daños en algunas de esas avenidas han ocasionado que ni siquiera las carretas puedan pasar, y ya mejor las dieron por cerradas al paso vehicular y, en otras, ni siquiera para personas.
Se cree que hay complicidad de la Sindicatura y de los Regidores, porque por más de dos años han guardado sumisamente el silencio, a pesar de la inconformidad popular. EL ORBE / Jesús Sánchez Martínez