Por Ernesto L. Quinteros
El Centro de Tapachula un Polvorín
Año con año los comerciantes informales instalan un tianguis navideño con el permiso de las autoridades del Ayuntamiento de Tapachula, quienes cobran los espacios por metro cuadrado de calles y banquetas, los cuales varían según ubicación; sin embargo en esta ocasión hay un abuso, pues ya se invadió el llamado centro histórico de la ciudad.
Pero lo más grave es que decenas de comerciantes ambulantes han aprovechado esta situación de desorden, para vender juegos pirotécnicos, almacenados en el corazón de la Perla del Soconusco, sin las medidas de seguridad necesarias para el manejo de los productos que contienen pólvora, la gran mayoría de dudosa procedencia, e incluso de China.
En pocas palabras, el centro de la ciudad de Tapachula está convertido en un “polvorín”, que pone en riesgo la seguridad de la población y de quienes trabajan y habitan en esta zona de la ciudad, en donde los más beneficiados son los funcionarios de la Secretaría de Servicios Públicos Municipal, a quienes los comerciantes establecidos señalan como los responsables de vender calles y banquetas al comercio ambulante.
A decir de los propios comerciantes, no cuentan con los permisos para vender los productos con pólvora, pero el peligro es latente, ya que existe una saturación de estos productos, ante la indiferencia de las autoridades de los tres niveles de gobierno.
Las calles y avenidas más invadidas son la 10ª Norte, 5ª Poniente, 7ª Poniente y la 9ª Poniente.
Los ambulantes ya invadieron las calles aledañas del mercado “Sebastián Escobar”, en donde el tránsito vehicular es a vuelta de rueda, y vehículos grandes no pueden transitar por el lugar, sólo vehículos compactos.
Es decir, el crecimiento ha sido desmedido del comercio informal, que sigue invadiendo la vía pública, con la anuencia de las autoridades.
Por lo pronto, los comerciantes establecidos de esta zona de la ciudad, andan con el Jesús en la boca, ante el temor de que pueda ocurrir una desgracia, por la gran cantidad de productos pirotécnicos almacenados en la zona.
Ante tal situación están haciendo un llamado a las autoridades de la SEDENA, SEMAR, Protección Civil Estatal y Municipal, Policía Federal, y los diferentes cuerpos de emergencia de la ciudad, para que acudan a hacer una verificación en la zona y recomienden tanto a los comerciantes ambulantes como a las autoridades locales, evitar seguir comercializando y almacenando estos productos en el centro de la ciudad, en locales que no cuentan con ninguna medida de seguridad.
Ya que están poniendo en riesgo a cientos de familias que a diario trabajan y acuden al centro de la ciudad a comprar diferentes productos.
Son decenas de ejemplos que existen a nivel nacional e internacional, en diferentes ciudades en donde han ocurrido desgracias por la explosión de juegos pirotécnicos almacenados de manera ilegal, que han cobrado cientos de vidas de niños, mujeres y ancianos.
Por ello el llamado es a tiempo, para que las autoridades tomen cartas en el asunto, y realizar las medidas de seguridad necesarias, ya que de lo contrario estarán omitiendo una gran responsabilidad.
Y es que es necesario que retiren de la vía pública a la gran mayoría de los puestos que venden pirotecnia, porque es muy peligroso.
Los más afectados y también temerosos por el “polvorín” en que se ha convertido el centro de la ciudad, son los comerciantes establecidos, quienes también reiteran que hay que aprender de los errores que se han cometido en otras partes de México y el mundo, en donde el uso indiscriminado y desmedido de juegos pirotécnicos que son almacenados de manera ilegal, y obviamente sin ninguna medida de seguridad ha cobrado cientos de vidas.
Por hoy ahí la dejamos, nos leemos mañana. ¡Animooo!
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